Columnas - Argentina

Bruno Rovagnati: Nuevos destinos en la búsqueda de talento

(28/04/20). Bruno Rovagnati, SVP Managing Director SS LATAM, hace un interesante análisis sobre el impacto de la crisis del coronavirus, destacando el tema del teletrabajo y cómo impactará en la búsqueda y captación de talentos de ahora en más, además de otros aprendizajes que deja la pandemia.

El Covid-19 demostró ser mucho más que una crisis sanitaria. Su impacto a nivel económico y social ha obligado a gobiernos, compañías y sociedades de todo el mundo a repensar los sistemas, procesos y formas de relacionamiento que tenían lugar antes de la pandemia. La velocidad con la que ocurren los cambios y la incertidumbre, demandan flexibilidad y agilidad para continuar avanzando.

Esta crisis genera nuevas necesidades y comportamientos, y en ella el enfoque “customer centric” adquiere un nuevo sentido, extendiéndose más allá de los propios consumidores de una marca, para alcanzar a toda la comunidad. Las empresas tienen la responsabilidad de detenerse y reflexionar sobre su rol en esta crisis, para entender cómo pueden ayudar como marcas, a partir de productos o servicios relevantes que solucionen los problemas que las personas están enfrentando hoy. En ese intercambio, la gente reconocerá el compromiso genuino y la contribución que las marcas puedan hacer desde su negocio, y rechazará a los oportunistas que actúen con irresponsabilidad y parezcan ignorar la coyuntura.

Pero la responsabilidad de las grandes empresas no será solo con sus usuarios, sino con todo su ecosistema. Socios estratégicos durante un contexto normal, clientes internos y proveedores también necesitan apoyo para mantener en funcionamiento sus negocios, que se ven tan seriamente afectados en este escenario.

Desde R/GA, siempre creímos que las marcas tienen éxito cuando combinan creatividad y tecnología para servir a las necesidades de las personas. Esta visión se hace incluso más cierta en momentos como este. Alejados de nuestra rutina diaria, la tecnología se convierte en una herramienta única para desarrollar servicios y experiencias compartidas.

Lo social debe estar tanto en el centro de la estrategia de las empresas para sus clientes, como para sus empleados. Entender a las personas desde una perspectiva integral, que combine lo laboral y lo personal, así como estar atentos a sus necesidades, es fundamental para crear juntos una experiencia positiva en esta etapa de trabajo remoto.

El espacio adquiere un lugar fundamental en esta dinámica. Además de contar con un espacio físico en casa destinado especialmente para el trabajo, y separado de la rutina diaria, también es importante que generemos espacios de bienestar, donde podamos encontrarnos, simplemente para charlar, compartir anécdotas y pasarla bien. Para eso, algunas de las iniciativas que implementamos en R/GA van desde reunirnos por las mañanas en un café virtual o terminar el día con un after y juegos para distendernos y encontrarnos con nuestros compañeros.

Trabajar desde casa también nos permite mejorar la integración de los equipos y desarrollar mayores niveles de empatía, ya que todos podemos sentir cómo es “estar del otro lado de la pantalla” y así generar nuevos hábitos y costumbres.

El trabajo remoto ha dejado de ser algo extraordinario, para ser una realidad compartida por todos. Hoy, todo el mundo está haciendo trabajo remoto, aunque tu colega esté a una cuadra de tu casa. Entonces, lo que antes muchos pensaban que era inviable, por el hecho de no tener a la otra persona al lado, hoy se ha convertido en la nueva norma. Y si es posible trabajar así entre compañeros de oficina, probablemente muchos se empiecen a preguntar por qué, si la tecnología es la misma, no podrían hacerlo con alguien que esté al otro lado del mundo.

Las barreras culturales y las diferencias horarias no desaparecen, pero sí desaparece la idea de que el trabajo tiene que ser en persona. Así, cuando analizamos cuestiones como el tipo de talento o tipo de cobertura en el tiempo, se abre la oportunidad de que el trabajo sea 24x7, además de contar con diferentes estructuras de costos según cada país. Todos estos factores ayudan a la apertura del mercado y a que se exploren nuevos destinos en busca de talento.

Así como el trabajo remoto, que antes se pensaba como una segunda opción, ha demostrado ser mucho más eficiente y ha sentado un nuevo paradigma en términos de relaciones laborales, existen otros aspectos que seguramente permanecerán como parte de los aprendizajes que nos deje el COVID-19: desde armar y compartir presentaciones online de forma colaborativa, a utilizar una herramienta como Slack para concentrar y comunicar información; hasta el uso de una plataforma como Zoom, que en diciembre tenía 10 millones de usuarios y hoy cuenta con 200 millones, aumentando 20 veces sus clientes en tan solo tres meses.

A su vez, algunas de las preguntas que, sin duda, ya están presente en todas las empresas, seguirán con nosotros cuando esto termine. Esas preguntas, por ejemplo, tendrán que ver con cuánto espacio de real estate necesita realmente una compañía o cuántas reuniones con clientes tienen que ser necesariamente presenciales. Esas preguntas son las que ahora nos vemos obligados a hacernos y que van a perdurar. Obviamente esto es como un péndulo, pero creo que hay un nuevo centro y ya no es posible volver donde estábamos.