La campaña está compuesta por spots de TV, menciones especiales, acciones digitales, folletos, gráfica, radio y decoración de tienda, apoyado con dos acciones: la retirada durante este año de cien aditivos controvertidos en todos los productos de su marca Carrefour y la garantía de frescura de su pescado al trabajar con 66 lonjas nacionales.
Todos los mensajes de la campaña hacen referencia al buen precio, apelando al “value for money” de la marca, además de reforzar la verdad, ya que las afirmaciones que aparecen en las diferentes piezas no solo las hace Carrefour sino todos los profesionales que forman parte del proceso. Unas afirmaciones que son la respuesta a la inusual presencia en comunicación de unos clientes escépticos y retadores, a los que solo los hechos demostrados les devuelve la confianza.