Birmajer: los hechos artísticos que mejoran el mundo nacieron para divertir
(26/10/06). El escritor y periodista Marcelo Birmajer es uno de los guionistas de la serie "City Hunters", estrenada recientemente en Fox. En esta nota, el escritor habla de su experiencia en este proyecto lanzado por la productora Encuadre y Axe. Una entrevista en la que no podía faltar el sentido del humor.
Creada por Gastón Gorali y Alberto Stagnaro y producida por Encuadre para Axe, "City Hunter" explora a fondo el mundo de la seducción a través de la historia de un maestro y un aprendiz en el arte de la conquista femenina.
Los personajes están inspirados en diseños de Milo Manara, el mundialmente reconocido dibujante italiano.
Marcelo Birmajer fue uno de los guinistas que le dio vida a la historia.
Birmajer nació en Buenos Aires, en 1966. Es escritor. Ha publicado, entre otros libros, Un crímen secundario, El alma al diablo, Fábulas salvajes, El fuego más alto, Ser humano y otras desgracias, Historias de hombres casados, No tan distinto, Tres mosqueteros, Nuevas historias de hombres casados y Últimas historias de hombres casados, entre otros.
Es autor del guión cinematográfico "El abrazo partido", ganador del premio al Guión Inédito en el Festival de Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana 2002 y del Oso de Plata en Berlín 2004, del premio Clarín al mejor guión y mejor película, y nominada al Oscar por la Academia argentina de cine.
Ha ejercido el oficio de redactor y colaborador en más de un cincuentena de medios gráficos de habla hispana. Entre otros, ha publicados artículos y cuentos en la revistas Fierro, La Revista (del diario La Nación), Viva (del diario Clarín) y Página/30; en los diarios Clarín, La Nación y Página/12; y en los diarios españoles el ABC, El País y El Mundo. Escribe semanalmente en la revista Ya, del diario chileno El Mercurio.
Algunos de sus libros han sido traducidos al francés, al alemán, al italiano, al holandés y al portugués.
En mayo de 2006 presentó en Seoul, Corea del Sur, la primera traducción al coreano de sus “Historias de hombres casados”, libro publicado por la editorial Munhakndongne. En el año 2007 será publicada en hebreo su novela “Tres Mosqueteros”. Fue honrado con el premio Konex 2004 como uno de los cinco mejores escritores de la década 1994-2004 en el rubro Literatura Juvenil. El 29 de Enero de 2005 el prestigioso matutino New York Times publicó una entrevista de dos páginas sobre su obra. Fue ganador del premio White Ravens 2006, por su novela juvenil: El siglo XX.
A continuación, la divertida entrevista que Marcelo le brindó a LatinSpots:
¿Cuál es tu formación?, ¿cuál es tu experiencia en el mundo audiovisual?
-Hace mucho que no formo. Creo que la última vez que formé fue en la escuela Pueyrredón, que nos hacían tomar distancia. Desde entonces, no he vuelto a participar de una formación. En cuanto a mi experiencia audiovisual, soy el autor del guión de la película "El abrazo partido", ganadora del Oso de Plata en la Berlinale y del Premio Clarìn al mejor guión. También escribé los textos del documental "Sol de Noche". Y fui investigador del programa televisivo "El otro lado".
¿Cómo fue tu participación en la serie City Hunters?, ¿cómo te enteraste y por qué decidiste participar en ella?
-En la primera temporada eramos un grupo de tres guionistas y yo me sentaba en el extremo derecho de la mesa. Tomaba mucho café y pedía recurrentemente sushi. Una vez, en uno de los primeros encuentros, llevé una docena de medialunas para todos. Mi tarea específica era centrarme sobre todo en la trama, en la anécdota del capítulo. Pero también podía comentar cualquier estupidez para distender un poco el ambiente. Llamaban la atención mis continuos alegatos a favor de Estados Unidos, puesto que soy una de las pocas personas de mi generación que defiende a este país. Más de una vez fui sacudido por violentos ataques de risa, que no tenían una relación directa con los chistes que yo mismo sugería, sino con recuerdos fuera de lugar. En cuanto a por qué acepté trabajar en City Hunters, fue porque creí que me iban a dejar participar del mundo de los dibujos animados, como en "Roger Rabbit". E inicialmente esa era mi recompensa, pero luego me explicaron que había perdido mi oportunidad por exigir permanentemente sushi.
¿Qué te parece la idea de hacer una serie para un producto, para una marca?
-Quino pensó Mafalda para publicitar una heladera. De modo que como punto de partida es tan válido como cualquier otro. Generalmente, los hechos artísticos que mejoran el mundo son aquellos que inicialmente fueron concebidos con el afan de divertir, de emocionar, y de beneficiar a su autor de algún modo. Por el contrario, aquellos hechos artísticos que surgen por la voluntad de mejorar el mundo, suelen limitarse a aburrirnos, y al olvido.
Dada tu experiencia en el cine, ¿qué cambia a la hora de escribir una
serie?, ¿cuáles fueron las pautas para contar la historia?
-Para mí siempre se trata de narrar historias. Lo que varía es el tiempo. Pero a la hora de ponerme a escribir, siempre pienso en la misma secuencia: conflicto, batalla, desenlace. Lo demás es cuestión de tiempo y de economía del tiempo: cuánto tiempo le dedico a cada una de estas etapas, y cuántas características del personaje destacaré, según el tiempo que tenga. Gorali y Stagnaro fueron muy claros a la hora de explicarme lo que querían, y es lo que se ve: un joven derrotado por el amor, será convertido por un viejo y sabio bon vivant en un maestro del arte de la seducción.
Según tu opinión, ¿qué necesita un guión para ser interesante?
-Tener una buena historia, un buen par de frases, y un final impactante.
¿Cómo ves la redacción publicitaria?, ¿cuáles son los recursos usados que más te gustan?, ¿cuáles crees que son los principales defectos?
-Lo que más me gusta de la publicidad es el uso de la cotidianeidad. Por ejemplo, hay una muy linda, ahora, de un muchacho que interrumpe una sesión de entretenimiento, vestido de pinguino, para hablar por celular, cortando la ilusión de los niños. No me gusta cuando los publicitarios comienzan a repetir los mismos recursos: por ejemplo el sonido del grillo cuando se hace un silencio. Eso realmente me irrita. O el locutor que habla rápido. Eso también me saca de quicio.
¿Cómo ves la evolución del "contar historias" en general en los últimos años?, ¿cómo ves a los receptores actuales?, ¿avidos de qué?
-Creo que el arte de contar historias está cada vez en menos manos, porque muchos escritores se solazan en declamar el fin de la novela, y otros se vuelcan por un minimalismo sin anécdota. Pero en los dos casos, no se trata ni del fin de la novela ni del fin de las historias: son solamente las declaraciones de escritores agotados sin la humildad suficiente para reconocer que es a ellos a los que no se les ocurren historias, y no que las historias hayan terminado. Los receptores siempre están ávidos de lo mismo: una historia de amor, un crimen, un incesto. Yo les doy lo que quieren, porque es lo mismo que me gusta escribir.