En el comercial vemos inicialmente un breve videoclipe, en el cual se muestran imágenes históricas de la trayectoria del banco a lo largo de sus 70 años. En la secuencia vemos escenas del día a día en diversos ambientes y circunstancias de la vida, mientras la narración, a cargo del actor Daniel Boaventura, exalta el amplio portfolio de productos y servicios del banco y cómo Bradesco está presente en la vida de los brasileños. Son destacados también el apoyo de la institución a la cultura popular y al deporte, y la condición de Bradesco como patrocinador oficial de los Juegos Olímpicos de 2016. Completan la campaña anuncios de doble página, spots de radio y acciones de internet.