Marcas como Coca Cola, Procter & Gamble, Toyota y General Electric, son algunas de las compañías que ejecutan el poder del color verde y que lo entienden como signo de madurez de su imagen. Si bien Coca Cola desarrolla frecuentemente actividades para fomentar su sustentabilidad, no solía lanzar campañas respecto a la protección ambiental desde que Hendrik Steckhan asumió como manager general de la compañía y consideró que publicidades “teñidas de verde” pondrían a la marca a la defensiva. Sin embargo, esta política caducó y dio lugar a la nueva campaña desarrollada por Leo Burnett de Publicis Group en conjunto con Chandler Chicco Agency. La misma cuenta con un inédito presupuesto de US$ 10 millones para campañas de este tinte y realza el rol de Coca Cola como una empresa inclinada hacia la protección ambiental y una vida sana, a través del diseño de nuevos formatos “que complazcan tanto a los consumidores como al medio ambiente”. Para eso, anunciará en medios impresos avisos con distintos envases del producto hasta llegar a la evolucionada “botella de aluminio”. Los mismos están dirigidos al público en general y a profesionales y médicos en particular, con quienes Coca Cola se compromete a reciclar el cien por ciento de las latas vendidas en Estados Unidos. Además, esta semana presentará el spot “Mailbox” y durante los Juegos Olímpicos pondrá al aire “Football 1951 vs. 2008”, ambos con el objetivo de crear una imagen pro-cuidado ambiental.