El pasado 11 de julio, bajo el título “The Good Economy” (La Buena Economía”), se llevó adelante en el Malba el segundo evento del Sustainable Brands Buenos Aires, en el que se debatió la función de las marcas para la construcción de un futuro sustentable. Dentro de este marco, tuvieron lugar las palabras de Cristian Pérez, quién explicó el caso de Coca-Cola Argentina: la compañía es uno de los principales compradores y exportadores de la producción citrícola de la provincia de Entre Ríos, producción que forma parte del motor económico de la región.
–¿Cómo considera que su caso aporta a la construcción de una Buena Economía?
–La construcción de una sociedad sustentable es un camino que comenzamos a emprender hace tiempo. La meta siempre ha sido clara: que las prácticas sustentables sean una realidad y que contribuyan cada vez más al crecimiento y desarrollo de las comunidades. El escenario actual nos demanda cada vez más que seamos protagonistas de esta transformación; debemos liderar y comprometernos desde nuestros valores con las realidades y necesidades locales. En Coca-Cola entendemos que la sustentabilidad debe estar en el centro de todas nuestras decisiones y acciones. Creamos valor económico, social y ambiental trabajando en colaboración con nuestros socios embotelladores, socios de la industria, organizaciones no gubernamentales, universidades y representantes del sector público, cristalizando sus convicciones, compromisos y visión ética en acciones concretas a lo largo de toda nuestra cadena de valor. Estamos convencidos de que los negocios exitosos son posibles en comunidades sustentables. Estamos presentes en cada rincón del país, llegando con nuestros productos y acciones hasta los pueblos más remotos. Nuestros productos son parte de la vida de todos los argentinos. Esto nos conlleva una gran responsabilidad.
–¿Cuál es el impacto de Coca-Cola en las economías regionales?
–El Sistema Coca-Cola tiene un gran impacto en las economías regionales: anualmente adquirimos más de 42.000 toneladas de jugo concentrado de naranja, limón, pomelo, manzana, pera, durazno y uva, lo que representa más de 250 millones de dólares para las economías regionales. Tener un alcance de tal magnitud implica que debamos ser sumamente responsables en nuestras decisiones y acciones. Por eso nuestro compromiso empieza por lo que producimos y vendemos, y continúa con nuestra visión de crear valor compartido con la sociedad. Un ejemplo de esto son las iniciativas que desarrollamos en la provincia de Entre Ríos, cuya producción citrícola es el motor económico de la región, que hoy nos permiten cuidar los sueños y proyectos de 37.000 familias. Entender la importancia de nuestro rol en la sociedad y el alcance del impacto de nuestras operaciones es la clave para alcanzar la meta. Sabemos que detrás de todos estos números hay familias, sueños y proyectos de vida que queremos seguir acompañando. Ese es el camino para construir sociedades sustentables y en ese sentido continuaremos trabajando.
Cristian Pérez es Director de Asuntos Públicos y Comunicaciones en Coca-Cola Argentina. Previo a su ingreso a la compañía, fue responsable de Asuntos Públicos y Relaciones con Pacientes en Novartis Argentina. También se desempeñó como Asesor del Gobierno de la Provincia de Neuquén y consultor para el Consejo Federal de Inversiones, el Banco Interamericano de Desarrollo y la Corporación Andina de Fomento. Además, es Profesor de Posgrado en temas Sustentabilidad y Ética en los Negocios en la Universidad Católica Argentina y en la Universidad Nacional del Comahue.
El evento principal de Sustainable Brands Buenos Aires será el 21 de septiembre en La Rural y su eje es “Redefining the good life”, es decir, cómo los consumidores de todo el mundo se están volviendo cada vez más exigentes con las marcas, en busca de nuevos productos que sorprendan y contribuyan con la creación de un ambiente y una sociedad sustentable.
Las conferencias Sustainable Brands comenzaron en el año 2006 en San Diego, siguieron en Río de Janeiro, Londres, Madrid, Ciudad del Cabo, Filadelfia, Kuala Lumpur, Bangkok, Detroit, Estambul, Tokio, Sydney y Copenhague, convirtiéndose en un centro de gravedad para empresas y organizaciones comprometidas con la sustentabilidad. Este año, y por tercera vez consecutiva, se realizan en Buenos Aires, para seguir expandiendo las conexiones entre profesionales de todo el mundo que trabajan activamente en este cambio cultural.