“A veces, la realidad supera a la ficción. En un mes, recorrimos todo el mundo en busca de los fanáticos más acérrimos de nuestra competencia para convertirlos en fans del Big King. Una idea tan difícil como fascinante”, describió Rodrigo Grau, Vicepresidente Creativo de DAVID San Pablo.
En el canal oficial de Youtube de la marca, Burger King afirmó que buscaron personas que tuvieran tatuada la hamburguesa más famosa del mundo -Big Mac- y, acto seguido, les dieron a probar su nuevo producto. “No sabían que el sabor de la carne grillada por el fuego iba a dejarles una marca que duraría para siempre”, complementaron.
La producción estuvo en manos de Crane TV y la dirección de Vandalo, mientras que la Dirección General Creativa fue de Rodrigo Grau y la Dirección Creativa de Edgard Gianesi. Gracias a su labor encontraron a cinco fanáticos de cinco lugares diferentes: Taiwán, Italia, España, Brasil y Estados Unidos.
En alrededor de tres minutos, el comercial muestra a cinco personas contando cómo llegaron a tatuarse el Big Mac. Acto seguido, reciben una carta por parte de Burger King invitándolos a probar el nuevo Big King en San Pablo. Al llegar al local de comidas rápidas se encuentran con Ami James, tatuador del programa Miami Ink, que los convenció para que modificaran el tatuaje que tenían y lo convirtieran en el nuevo producto de la marca.
De los cinco, solo uno se rehusó a hacerlo. “Robert”, de Los Ángeles, optó por no modificar su tatuaje a causa del alto valor sentimental que tenía: era exactamente el mismo diseño que tenía con su hermano.
DAVID volvió a romper un paradigma. Antes con el “Proud Whopper” y el insight de que todos somos iguales más allá de los gustos sexuales de cada uno, y ahora con “The Big King”, en un claro guiño a su más grande competidor.