Luego de casi seis años de tratativas, el Jurado de Chicago falló a favor de Michael Jordan, por considerar que Dominicks Market no estaba autorizado a lanzar el anuncio sin el aval del deportista. De hecho, antes de llegar a la instancia del juicio habían tomado esa decisión, solo restaba deliberar cuánto dinero le correspondía.
Particularmente, fue por la promoción que hicieron de las “Ranchers Reserve steaks” dentro de la revista Sports Illustrated, donde se conmemoraba el ingreso del ex Chicago Bulls al Salón de la Fama del Básquet. En un primer momento, los abogados del supermercado -subsidiario de Safeway Inc.- argumentaron que el monto que ellos consideraban adecuado era 126.900 dólares.
“Es mi nombre, y trabajé muy duro por él por más de treinta años. No voy a dejar que cualquiera lo use”, dijo a la salida de la corte. Además, aseguró que ése no es el lugar en el que le gusta ganar, pero quedó muy conforme con el resultado. Fred Sperling, su abogado, destacó que muchas compañías quieren asociarse al éxito que tuvo Jordan en su carrera, además de ser un hombre con una integridad incuestionable. “El año pasado, facturó más de 100 millones de dólares, más de lo que acumuló en toda su carrera”, remató.
Al mismo tiempo, el actual propietario de los Charlotte Hornets, dijo que este caso no se trató de dinero, sino de enviar un mensaje, tanto a Estados Unidos como al resto del mundo, de que continuará en vigilia respecto de la protección de su nombre e identidad.
Sin embargo, aprovechó la situación para promocionar una de sus tantas compañías. Cuando salía del juicio, la prensa estadounidense le preguntó si hubiera probado las “Ranchers Reserve steaks”, y el astro del básquet respondió: “No, tengo una Michael Jordan Steakhouse acá cerca”.