Todos los líderes de América latina, una región con una larga historia de golpes militares, pero que en las últimas décadas logró restablecer el orden democrático, rechazaron en duros términos la destitución de Zelaya y abogaron por la inmediata restitución del orden constitucional.
Cristina Kirchner, presidente de Argentina dijo: "El golpe en Honduras es un hecho que nos remonta a la peor barbarie de la historia de América latina". Además, instruyó al canciller Jorge Taiana a tomar contacto con sus pares latinoamericanos con el fin de coordinar una acción inmediata de los organismos multilaterales de la región.
Desde La Habana, el canciller cubano, Bruno Rodríguez, describió el golpe como una acción "criminal" y añadió: "En el mundo de hoy, no es posible realizar golpes de Estado brutales, violatorios del derecho, como éste. La época de las dictaduras militares en América latina ya pasó".
También fue enérgica la reacción de Ecuador, cuyo presidente, Rafael Correa, advirtió que no reconocerá a ningún otro gobierno que asuma en Honduras, e instó "con todo respeto, pero con todo cariño y solidaridad, al pueblo hondureño a levantarse contra estos poderes fácticos".
La cancillería de Brasil, en tanto, señaló que "acciones militares de este tipo configuran un atentado a la democracia", y exigió la restitución de Zelaya en sus funciones "en forma inmediata y sin condiciones".
"Nunca he renunciado ni nunca voy a usar ese mecanismo. Es totalmente falso. Es otro crimen más contra la democracia. Es una conspiración político-militar de una elite que tiene miedo a las manifestaciones políticas", dijo Zelaya desde el aeropuerto de San José. "A mí casi me asesinan en la mañana; entraron a balazos; rompieron las puertas a balazos; entraron militares encapuchados y me sacaron amenazado de muerte", añadió.
El presidente venezolano, Hugo Chávez, estrecho aliado de Zelaya, fue uno de los primeros en reaccionar, e incluso puso en alerta a sus tropas. Se le sumó poco después el mandatario estadounidense, Barack Obama, quien exigió una resolución pacífica del conflicto a través del diálogo y las normas democráticas. "Insto a todos los actores políticos y sociales a respetar las normas democráticas, el Estado de Derecho y los principios de la Carta Democrática Interamericana", señaló Obama en un comunicado.
Basta de censura
El canal 36 que dirige el periodista Esdras Amado López volverá al aire a partir de este día, al igual que otros canales que no estaban transmitiendo a raíz de la transición de poder que se dio en Honduras.
El canal 8 también que difundia la información oficial del Gobierno del ex presidente Zelaya dejo de transmitir desde que hubo una transición de poder en el país.
Si los militares golpistas, acompañados por los dos partidos políticos más importantes de Honduras -el Liberal y el Nacional- pretendían restaurar la "legalidad" y llevar calma a la población, con el grotesco golpe de Estado del domingo lograron exactamente lo contrario. Hoy, este empobrecido país se sumerge inexorablemente en el caos interno y en el aislamiento internacional.
Fuente: La Nación, Reuters, Clarín, Página 12 y Hondudiario