Elegir o no elegir, esa es la cuestión
(29/10/07). La imagen de un bebé recién nacido con una pulsera que dice “Homosexual” es parte de la nueva campaña contra la homofobia que ilustra el mensaje “La orientación sexual no es una elección". La gráfica ya generó controversias en la región italiana de Toscana, donde fue lanzada.
La campaña fue impulsada por el Gobierno regional de Toscana en el marco de un festival en contra de la homofobia y creada por la fundación canadiense Emergence.
La acción despertó una gran polémica que enfrentó a liberales y conservadores en torno a si la condición de homosexualidad surge de una elección o si su origen es de naturaleza innata.
La mayor asociación que defiende a los derechos de la población homosexual en Italia, ArciGay, saludó la acción. Alineado con esta posición estuvo el legislador Franco Grillini. quien apoyó el anuncio por expresar un concepto del que está convencido: “La homosexualidad no es una elección. La única elección posible es aceptarla o vivir infeliz", agregó.
Desde la vereda de enfrente, el legislador demócrata-cristiano Luca Volante repudió el anuncio y dijo que “se está usando a un recién nacido para sugerir la idea equivocada y vergonzosa de que tendencias homosexuales son una condición innata”.
Para tratar de ponerle fin a la polémica, el consultor Agostino Fragai -involucrado en la elección de la campaña para la región de Toscana-, dijo que a pesar de que la imagen era provocadora, era oportuna para generar consciencia.
"La elegimos porque es un póster fuerte pero tierno, con un bebé en él", dijo Fragai, quién agregó: “La región no está interesada en unirse al debate de si la orientación sexual está determinada de nacimiento, añadió. Esto es un póster, no un tratado científico",
La publicidad que será mostrada cerca de centros administrativos, escuelas y universidades de Florencia y otras ciudades de la región, vuelve a poner a Italia como centro de atención en el plano de los anuncios polémicos.
Semanas atrás, una publicidad en contra de la anorexia producida por el fotógrafo Oliviero Toscani, fue prohibida en toda Italia por una entidad reguladora de ese país. La foto mostraba a una modelo extremadamente delgada, víctima de esa enfermedad.