Esperanza Sarmiento-Moreno, Head of Strategic Partnerships de Havas Media Group Colombia

Debemos romper el paradigma de la “discriminación”, el término aplicado al género es un mito, pues las mismas personas se discriminan por sus limitaciones mentales.

Es frecuente el pensamiento de que las personas que han llegado a posiciones de grandes responsabilidades lo han hecho bien sea al tener influencia en su gremio, o por ser apadrinados por un grande, o por haber movido cielo y tierra para posicionarse allí. En la industria de la creatividad, los directores creativos y copys son hombres, pero esto no quiere decir que sea culpa del gremio, sino de las mismas personas que no creen poder llegar a estas instancias.

Las mujeres en altos cargos inspiran a las demás, pero si es así, ¿por qué no tenemos más mujeres en cargos de autoridad y autonomía? Y está bien que a veces esta industria exige ser cool, pero no basta con ello, hay que ser relevante para tener credibilidad e inspirar a un equipo.

Es importante recordar que la importancia de las mujeres a lo largo de la historia ha sido marcada no por el hecho de ser mujeres, sino por ser buenas en lo que hacen, y que por serlo, en su momento fueron disruptivas y se les tildó de estar equivocadas, pero hicieron historia porque el tiempo les dio la razón y fueron exitosas.

Cada quien verá qué tipo de llantas necesita, el tipo de bicicleta, el color, y las especificaciones de acuerdo al camino por el que va a transitar, a veces sólo se requiere una bicicleta de carreras porque vas a ir rápido, otras veces una BMX porque necesitas hacer piruetas, pero si vas a meterte por una trocha es necesaria una todoterreno.

No se trata de honrar al género con el talento, sino honrar al ser humano y sus capacidades.

Si bien es cierto que en ocasiones deben trabajar más que los hombres para resaltar sus cualidades empresariales, el mundo ha cambiado, y si alguien quiere “reivindicar el papel de la mujer” debe entender que no hay que tratarnos con preferencia, sino con igualdad.

Venimos con un antecedente donde la mujer venía siendo importante para el hogar pero no en el mundo laboral, pero esto ya es parte del pasado y quien se resista a esto está condenado al fracaso profesional.

Pienso que hay una misión enorme y es fortalecer que sean guerreras, creérsela que somos mejores, y no es una batalla de género con los hombres, sino estar siempre en busca de la excelencia, superando lo que se nos ha venido enseñando en los hogares tradicionales.

Sabemos que no debería haber diferencia entre masculino y femenino, el ser humano debe ser valorado por sus aptitudes, capacidades y por lo que puede aportar a la sociedad. Sea hombre o mujer, la persona que es verraca puede resaltarse en el gremio o en cualquier actividad.

El kilometraje acumulado permite que montes mejor la bicicleta y que cada vez quieras explorar otros caminos, que quieras hacer otros recorridos que te llevarán a sitios que nunca habías pensado. De igual manera ocurre con el éxito, cada quien tiene la visión que la formación que ha tenido a lo largo de su vida le ha dado, y ha sido responsable por el tipo de visión que tiene, esto le da las herramientas para transitar.

“El éxito es un estado mental y no tiene género”

Por mi parte, el mejor ejemplo que tuve fue mi madre, era una empresaria apabullante, de la nada tenía ideas y se las ingeniaba para hacer realidad sus negocios, para mí a ella le quedaba el mundo chiquito; murió joven pero hizo historia al inculcarnos la visión de que cuando hay un ejemplo a seguir, y es inspirador para alguien, es importante para desarrollar esa capacidad de liderazgo.

El tipo de bicicleta –al igual que el éxito- viene customizado de acuerdo a las necesidades de quien lo obtiene.

UNA BICICLETA LA PUEDEN USAR HOMBRES Y MUJERES, Y HAY UNA SOLA MANERA COMO FUNCIONA: PEDALEANDO