El nuevo método de contribución permite a los donantes empezar a ayudar tan rápidamente como los equipos de rescate. El importe está vinculado a los sistemas de seguimiento de MSF y, cuando se produce la catástrofe, se libera la donación. Los donantes son informados cuando esto ocurre.

La ayuda financiera de las campañas de recaudación de fondos puede tardar hasta 72 horas en llegar. Esto puede impedir que MSF responda con la rapidez que desearía. Con las "donaciones de prepago", la organización benéfica tendrá acceso inmediato a las donaciones que se han recogido por adelantado y que se activan cuando ocurre la catástrofe.

La campaña se dirige principalmente a los jóvenes de 18 a 35 años. Se ha creado una herramienta para ofrecerles una "experiencia real" e implicarles al máximo. Gracias a la información que reciben los donantes a través de notificaciones y correos electrónicos, tienen una visión más clara y transparente de las intervenciones de MSF y de cómo se utilizan sus donaciones.