En 2007, luego de un año brillante, como director general creativo de Lowe, donde fue consagrado como el Mejor Director Creativo de México y logró llevarse el reconocimiento al Mejor Comercial de Televisión de su país por su trabajo 25 años para MTV en El Ojo de Iberoamérica 2007, y su agencia resultó la más premiada del Círculo de Oro de México, Humberto Polar dejó la publicidad para dedicarse a la música. "Estoy tremendamente feliz, es el momento más lindo de mi carrera", declaró en su momento el creativo cuando fue entrevistado para la Edición 79 de LatinSpots.
A continuación compartimos la entrevista con Humberto.
- ¿Cómo recibiste la propuesta de Mayo, y que te impulsó a aceptarla?
- Tengo una amistad con Juan Saux de varios años atrás. Hace un año empecé una consultoría sobre procesos creativos internos en Mayo. Yo estaba repartido entre Barcelona, Berlín y México pero venía cada dos meses a Lima. Vi de primera mano que Juan había decidido que su agencia tenga un compromiso muy serio con la calidad creativa. Me sedujo volver a ser protagonista de un cambio inmenso en una industria remozada como la peruana, que además es mi tierra natal. Así que decidí regresarme del todo al Perú y hacer de esa consultoría un trabajo de tiempo completo, ahora sí al frente de la DCG.
- ¿Ya estás en funciones dentro de la agencia?
- Durante enero estoy conociendo a nuestros clientes y estudiando una reestructura del modelo creativo. En febrero arranca la nueva era. También estoy organizando los proyectos que desarrollé en estos años a través de un nuevo modelo de negocio llamado La Contra. He encontrado la gente adecuada que está tomando la posta. Queremos consolidar un grupo de comunicación revolucionario.
- ¿Cómo fueron estos años alejado de la publicidad, que tipo de contacto mantuviste?
- Cuando salgo de Lowe México en el 2007 la dejo de número 1 en el Círculo, en El Ojo, nombrado mejor DC de México... obviamente fue un trabajo titánico, estaba muy cansado. También era head de Latinoamérica, imagínate. Y además quería, y podía, tomar una distancia de la industria tras 21 años sin parar. Por otro lado, estaba seguro (y el tiempo me dio la razón) de que si no me metía dentro de los cambios de comportamiento de las comunicaciones en el mundo real, no iba a entender nada. Los creativos a veces vivimos en encierros peligrosos. Me molestaba hablar a los clientes de internet, de contenidos, de engagement, de blogs, de redes y no saber al dedillo como funciona todo esto. Me metí de lleno a desarrollar comunidades, sellos musicales y radio online, d-mags. No volví a Cannes. No volví a leer LatinSpots. Leí sobre sociología, nuevos modelos, cultura digital sin el sesgo de estar en una agencia. Cuatro años de d-tox de premios, viendo cómo son las cosas con la gente de a pie. O de a mouse, más bien.
- ¿Qué cambios notas que tuvieron lugar a través de estos años?
- Creo que lo que cambió más rotundamente es que antes creíamos saber lo que la gente piensa y hoy ya no tenemos dudas. Se abrió el secreto. Vivimos en focus perpetuo. La gente sabe lo que quiere y debemos aprender a escuchar. Hace 10 años nos llenábamos la boca profetizando el colapso de las marcas que ignoran o malinterpretan al consumidor. Hoy la pregunta es, ¿estamos del lado de los que entienden? No se trata de qué tanta tecnología dominemos en nuestro modelos, es cuánto entendemos el principio con el que funciona el interés por los mensajes en este momento de la historia. Aunque suene a cliché, comprobé que todo sigue pasando por articularse en torno a una buena idea. Lo que pasa es que la noción de una buena idea es a veces divergente entre lo que pensamos los creativos y lo que entiende la gente. A niveles chocantes.
- ¿Qué crees que le puede aportar a esta nueva etapa de tu carrera publicitaria lo vivido en el ámbito de la música?
- Cuando lanzo un release algunos de mis sellos o posteo una nota sobre rock independiente en alguna de las comunidades que manejo, sé en 45 minutos si lo que puse es un éxito o un desastre. Pero eso lo debo ver como la oportunidad diaria de aprender y mejorar. Allá el que no usa las oportunidades que tiene. Ese sentido de la autocrítica permanente, de la observación en tiempo real de la gente, es lo que traigo ahora a mi nuevo rol. En la música es clarísimo cuando algo funciona y cuando no. No puedes culpar a nadie externo. La calidad de tu mensaje lo es todo. Sea en pop adolescente, en abstract hiphop o en avant-garde marciano.
- ¿Cuáles son tus objetivos en Mayo?
- Ponerla en el podio de las empresas creativas de Latinoamérica. Hacer trabajo maravilloso. Divertirme en mi reencuentro con la locura de una agencia.