-¿Qué expectativas tiene en el nuevo cargo que le asignaron?
- Expectativas de seguir haciendo lo que sé hacer; un producto sí o sí creativo, ajustado a los objetivos de cada campaña y a las realidades de las personas a las que se dirige. Y segundo, expectativas de aprender todo lo que no sé; el hacerme cargo de una agencia desde la dirección creativa general y ver cómo me desarrollo en esta nueva área con aciertos y errores.
-¿Qué significa para usted haber sido promovida a DGC de Lowe 180?
-Un reconocimiento para mí y mis. Entendiendo a “mi” como el trabajo que he hecho desde hace 20 años: honesto, creativo y optimista; y al “mis” como el que he hecho de todas las personas que han trabajado conmigo, que me han enseñado y me han ayudado.
-¿Cuál es el desafío y objetivo que tiene para lo que viene?
-Mi desafío es hacer un guión clisé de Hollywood: una directora creativa mujer que llega a una agencia y logra hacerla crecer en el menor tiempo posible; motivando a todos, siendo feliz, influyendo directamente en los resultados de nuestros clientes que suben sus curvas de ventas de manera significativa después de mi llegada y donde todo es un éxito rotundo después de un gran esfuerzo colectivo.
-¿En qué está hoy la agencia? ¿Con qué cuentas están trabajando?
-La agencia está apostando a dar soluciones a los clientes de la manera más creativa posible. Actualmente trabajamos con Carozzi y sus marcas Vivo y Costa; helados Trendy; Metro; Multitiendas Corona; Toc-toc; CNTV; Selva Viva; Echeverría Izquierdo; entre otros.
-¿Cómo está la industria chilena actualmente?
-El panorama que veo es que los medios están cada día más caros, las metas de ventas cada vez más altas y los tiempos para llegar a ellas cada vez más cortos. Sin embargo, la creatividad con su poder mágico, siempre da una solución ante cualquier escenario.
- En este contexto, ¿Cómo ve la creatividad en Chile?
-En Chile existe la creatividad y existe la imagen. Los chilenos somos muy creativos pero muy acomplejados. Usamos la creatividad para salir adelante de escenarios más adversos. Somos capaces de escribir discursos hermosos, siempre que nadie nos vea. Cuando nos exponemos, nos ponemos colorados y nuestros discursos se cambian a un tono moralista con toques políticos. Muchas marcas son quienes querríamos ser para el resto. Y es difícil ser original cuando se siente miedo al ridículo.