La vestimenta, el ambiente y los cuatro personajes están aclimatados en los 50s. Con una música instrumental de fondo, producida por Miles Kempton y GCRS, el plano se acerca a la famila (compuesta por el padre, la madre y los dos hijos) para mostrar las cuatro maneras de comer Kit Kat.
El primero es el hijo mayor, quien sería "el rompedor", ya que parte el chocolate a la mitad. El concepto es llevado al extremo: se lo muestra con una vincha de Tao Kwon Do poniendo el Kit Kat entre dos madera. El humor de lo absurdo.
En esta idea pensada por Fernando Barbella, Pipo Virgos, Nathan Holley y Lawrence Parmenter, la hija de la familia exhibe la segunda forma en la que se puede comer el chocolate: "la mojadora". Es simple, toma la barrita de Kit Kat y la hunde en una taza de café o leche. En este punto, la ambientación de los 50s se rompe porque la chica se saca una selfie con su smartphone.
La madre, por su parte, encarna a todas aquellas personas que comen el KitKat moviéndolo en una taza con íquido, ella es "la revolvedora". Y para girarlo utiliza un elemento insólito: el pedal de una máquina de coser.
"El mordisqueador" es el estilo que utiliza el padre de la familia para comer, pero el movimiento que hace se emparenta más a una máquina de escribir que a una ardilla.
"Have a break, have a Kit Kat" es el concepto sobre el que gira esta campaña, el cual se basa la ambiguedad de la palabra "break", porque refiere tanto a una pausa como al acto de partir del KiKat para comerlo.