La pileta y el sol exigen más cuidados para la piel, el cuerpo, la alimentación y la zona íntima. Es por eso que la médica ginecóloga y obstetra especialista de Kimberly-Clark para Kotex, Ena Victoria Ramírez Peñuela, brinda algunos consejos para saber cómo cuidarse al máximo para poder disfrutar de las actividades de verano, fresca y protegida.
-No quedarse con el traje de baño mojado: es algo muy común estando en la pileta o en la playa. No hay que quedarse demasiado tiempo así, ya que se humedece demasiado la zona íntima, volviéndose más propensa a infecciones.
-Utilizar ropa de algodón y prendas no muy apretadas: es importante que la ropa sea de materiales que permitan la transpiración para evitar aumentar la temperatura y humedad como, por ejemplo, el algodón.
-En los días más femeninos, no te detengas: podrán estar hinchadas, doloridas o con retrasos involuntarios. Pero eso no debe impedir seguir la rutina, ya que utilizando la protección femenina correspondiente se puede disfrutar. Es recomendable cambiar reiteradas veces las toallitas o los tampones, para evitar toda posibilidad de aumentar la temperatura y cambiar el PH.
-Ser cuidadosa después de la o las duchas: con el calor, nos duchemos más de una vez al día. Pero, aunque sea solo una vez, es importante secar bien la zona íntima para que no quede húmeda, ya que favorece la posibilidad de alojar bacterias.
-No depilarse por completo: si bien es mucho más cómodo a la hora de ponerse una bikini o enteriza, los vellos son sabios y cumplen funciones como la protección del pubis de fricciones, golpes y funcionan como una barrera para que la transpiración o el agua no entre en contacto directo.