Desde La Comunidad explican cómo nació esta idea de transformar LOVE en AMÁ: “Cuando partís de un vino que se llama LOVE tal vez lo más lógico sería pensar en la clase de amor más famosa de todas, esa que existe entre dos personas que se quieren mucho y que conocemos de incontables comerciales, películas, pasacalles, mensajitos de texto, y tal vez muy de vez en cuando también en persona. Pero si hubiéramos hablado de ese tipo de amor no hubiéramos sido los únicos. Entonces pensamos en otro tipo de amor, y el objetivo se convirtió en un doble desafío: no sólo encontrar un concepto que identifique a este vino, sino uno que además lo distinga de otros posicionados en el territorio del amor entendido como amor de pareja”.