Tobbie Hatfield, Diseñador de Nike, asegura que todos los productos que hacen son para que los deportistas tengan una buena performance y para que todo atleta del mundo, sea reconocido o no, tenga la inspiración y la innovación que necesita. Pero en los últimos meses la marca se interesó por brindarle una mejor calidad de vida a las personas, y ahí es donde entra Matt Walzer.

Hace tres años, Mark Parker, Presidente y CEO de Nike, recibió una carta a través de las redes sociales firmada por Walzer. El escrito decía: “Mi sueño es ir al colegio que quiero, sin necesitar de alguien para atarme las zapatillas. Usé las zapatillas de basketball de Nike toda mi vida. Sólo puedo usar estos modelos porque necesito el apoyo del tobillo para caminar. A los 16 años, soy capaz de vestirme por completo a mí mismo, pero mis padres todavía tienen que atarme los cordones. Como un adolescente que se esfuerza por llegar a ser totalmente autosuficiente, me parece muy frustrante y, a veces, vergonzoso”.

Las palabras no tardaron en llegar a oídos de Hatfield, que se encarga, entre otras cosas, de diseñar el calzado de los atletas olímpicos especiales que se encuentran en la misma situación que Walzer, con quien se puso en contacto para que probara distintos prototipos. “El trabajo que hice con Matthew fue el mismo que hago con cualquier atleta, fue un placer haber compartido tiempo con él”, aseguró el diseñador.

El joven Walzer, al iniciar las pruebas con Hatfield, explicó que estaban haciendo algo sagrado, pero que al principio tenía muy pocas expectativas. “Esperaba que me mandaran una carta amable en reconocimiento a mi pedido. No hay agradecimiento suficiente para expresar la gratitud que siento”, confesó, luego de ver el modelo que el diseñador había hecho inspirándose en su historia.

En 2012, Walzer recibió en su casa una caja con un par de zapatillas de prueba. “El equipo de diseñadores creó un modelo que, por primera vez en mi vida, puedo ponérmelo sin ayuda. Cada vez que me las pongo me transmiten una sensación de independencia”, declaró.

Pero eso no fue todo. Hatfield siguió probando y creando modelos, hasta que por fin desarrolló uno que cumplía con aquello que estaba buscando. Luego de tener en cuenta varios modelos, como Nike HyperDunk, Nike Zoom Soldier o, incluso, toda la línea de LeBron James, llegó a un resultado: Nike Flynease.

En la parte del talón tiene una cremallera que se puede abrir y cerrar con una sola mano y posibilita, además, que quien las use pueda introducir su pie de un modo más sencillo, en comparación a otros modelos. A su vez, cuenta con un abrojo al costado, para un cierre más hermético.

Nike no destinó fondos para la lucha contra los chicos que padecen parálisis cerebral, pero a través de un nuevo producto ayudó a Matthew Walzer -y a todos los que tienen su mismo problema- a ponerse las zapatillas sin ayuda.