En McCann Buenos Aires, hemos comenzado nuestro camino hacia la sostenibilidad en los últimos años. Nos hemos planteado preguntas clave sobre por qué es importante y por qué debe ser abordado como un tema urgente. La sostenibilidad nos permite ser más conscientes de las acciones y su impacto, como la oportunidad de crear una cultura más equitativa, es lo que genera una mejora en el clima organizacional. 

Una de las primeras acciones que implementamos fue registrar nuestra huella de carbono. Este proceso nos permitió evaluar el impacto ambiental de nuestras operaciones y nos impulsó a buscar formas de reducirlo. Además, durante nuestra mudanza a nuevas oficinas, donamos nuestros antiguos muebles a organizaciones que podrían aprovecharlos al máximo, promoviendo así la reutilización y evitando el desperdicio. 

Una vez instalados en nuestras nuevas instalaciones, implementamos diversas prácticas sostenibles. Implementamos cartelería para concientizar y promover el uso racional de la energía, instalamos dispensadores con purificadores de agua para contribuir al no uso de plásticos de un solo uso, eliminamos el uso de cubiertos desechables, implementamos la separación de residuos y creamos espacios verdes tanto dentro como en el patio de la oficina. 

Estas acciones no solo han sido motivadas por nuestra alianza con "Empresas Comprometidas con los Derechos Humanos", un programa del Gobierno de la Ciudad que nos brinda orientación en el área de Recursos Humanos en temas de medio ambiente, sino que también han sido respaldadas por talleres informativos sobre la crisis climática y el papel de la publicidad en la generación de un cambio positivo. 

Es importante destacar que estas acciones sostenibles tienen un impacto tangible en nuestro negocio, especialmente en lo que respecta a la comunicación con nuestros clientes. Evitamos el conocido "greenwashing" al ser conscientes de las expectativas de las audiencias y al garantizar que nuestras prácticas sean auténticas y respaldadas por una educación e información sólida sobre sostenibilidad. 

Además de los beneficios tangibles, también existe un cambio personal en cada colaborador y colaboradora. Estas acciones fomentan un cambio de hábitos y comportamientos que promueven el cambio de mentalidad y permiten compartir experiencias, generar conversaciones y plantear nuevas preguntas. Aspiramos a que estos cambios internos se reflejen en la reducción de nuestra huella de carbono y que también inspiren a otros a seguir nuestro ejemplo. 

No obstante, debemos reconocer que mantener y mejorar estos procesos es un desafío. En ocasiones, las agendas ocupadas pueden relegar estas temáticas a un segundo plano. Por esta razón, es crucial mantener a quienes lideran equipos informados sobre los cambios que estamos implementando y los motivos detrás de ellos. La sostenibilidad incluye lo ambiental, social y económico, y el equilibrio de los tres es lo que nos permite ser sostenibles.