El comercial muestra a niños superándose en su vida cotidiana, como la importancia del trabajo en equipo, alcanzando las golosinas de una repisa alta, destacándose en el colegio, entre otras cosas.
Una voz en off dice que fueron dias de mucha motivación y superación de límites y que, a pesar de que los Juegos Olímpicos llegaron a su fin, la inspiración que trajeron continua en el día a día de todos.