El sistema de diseño desarrollado por DXD, la división global de diseño de TBWA, transforma las ondas sonoras en tipografía dinámica, creando una experiencia visual única para cada proyecto.

Más que un simple rediseño, la marca adquiere ahora un sistema tipográfico vivo, que reacciona a las propiedades físicas del sonido. Inspirada en la esencia de Canja, la nueva identidad no comenzó con un logotipo, sino con una nota musical. A partir de ella, se creó un algoritmo exclusivo que modifica la tipografía en tiempo real: los graves (bass) alteran el peso de la fuente; los agudos (treble) ajustan el espaciado entre las letras; y la velocidad del ritmo comprime o estira las palabras.

¿El resultado? Cada proyecto sonoro de Canja, desde bandas sonoras para grandes marcas hasta iniciativas como los Black Grammys, adquiere una firma visual única, tan dinámica como el propio audio.

"Canja no solo necesitaba una imagen a la altura de su legado, sino algo que materializara su obsesión por el sonido», comenta Bruno Regalo, líder global de diseño de DXD y responsable de dirigir el proyecto de rebranding. "Como una buena canción, todo comenzó con una nota —el color base— y evolucionó hacia un sistema modular, donde cada píxel es sensible a la emoción que transmite el audio. Ahora, Canja no solo se escuchará, sino que también se sentirá visualmente", añade.