Cada año en España, más de 1.050 personas pierden la vida en siniestros de tráfico. Y aun así, por devastadoras que sean, estas tragedias reales apenas permanecen en nuestra memoria. En cambio, cuando un personaje muere en una serie de éxito, reaccionamos al instante: nos sorprende, nos emociona y llenamos las redes comentándolo. Estudios recientes muestran que el uso de redes sociales se multiplica por cuatro cuando ocurre una muerte impactante en televisión, llegando incluso a generar páginas dedicadas a recordarlas.
Nos obsesionan las muertes en pantalla, pero olvidamos las que ocurren en nuestras carreteras por distracciones, exceso de velocidad o consumo de alcohol. Para enfrentar esta contradicción, trazamos una línea clara entre lo que
nos entretiene y lo que realmente debería alarmarnos.
LAS MUERTES FICTICIAS NOS MARCAN… LAS REALES DESAPARECEN EN SILENCIO.
“La realidad supera a la ficción” rompe ese punto ciego cultural reinterpretando los posters más icónicos de las series más comentadas: desde el Juego del Calamar, Last of Us, hasta Severance entre otras. A primera vista, cada cartel
parece una promoción real. Pero al mirarlo de cerca, emerge algo mucho más duro: un siniestro oculto a simple vista. Y en lugar de actores, directores o productores, los créditos incluyen los nombres de personas reales que murieron en siniestros de tráfico en España. Un homenaje contundente a vidas que se fueron: Josep, Pablo, Jessica y muchas otras que nunca regresarán.
