Durante todo el día, en el Auditorio de Buenos Aires, podrán disfrutar de las visiones de algunos de los profesionales más respetados de la industria. Algunos de ellos son Germán Yunes, CEO de Geometry Global Latina; Mireia Roda, Directora de Arte, Diseñadora Gráfica y Fundadora de M4; Ernest Riba, Head de Desarrollo de Negocio y Producto del Grupo Havas Argentina; Gervasio Marques Peña, Gerente Comercial de La Nación; y Diego Luque, Socio y Co-Fundador de PICNIC.
A continuación, Mariano Fernández, quien fue Presidente de Asociación Argentina de Marketing (AAM) y hoy se desempeña como Director Ejecutivo, da su visión sobre “Marcas con Propósito”, el tema principal del evento.
“Marcas con Propósito”
Es hora de intentar diversas miradas, acerca de la relevancia creciente que tendrá fijar un propósito para la marca, que mejore la calidad de vida de sus consumidores y los involucre emotiva y eficientemente, con la causa para las personas con que cada marca sea creada. En este nuevo paradigma la rentabilidad dejará de ser un Objetivo para ser una consecuencia deseada de lograr bienes sustentables, que sean relevantes para consumidores cada vez más conscientes del poder que tienen en la responsabilidad de crear un mundo mejor.
Para definir un propósito inspirador tanto para nosotros como para los otros, primero debemos generar un marco completo de referencias que nos permitan decir una verdad que hable a través de nuestras creaciones y acciones, un discurso que sea coherente con el curso de nuestras acciones. Para ello será menester crear un sistema interconectado que genere una unidad armónica entre nuestra Misión, nuestra Visión, nuestros Principios Empresariales y nuestras Reglas de trabajo, con nuestros Valores compartidos con los integrantes, que desde cualquier cargo o nivel dentro de la empresa y toda nuestra cadena de valor, sean suscriptos de verdad y por convicción y no meramente enunciativos y por obligación.
La Misión de nuestra compañía nos debiera expresar la razón motivadora de su creación, con la suficiente diferenciación como para que nos genere una identidad clara y distintiva.
La Visión nos debería permitir, visualizar lo que queremos alcanzar a ser, en un futuro lo suficientemente inspirador pero lo suficientemente cercano para ser atractivo y alcanzable de lograr, esta Visión debe cumplir con la función de actualizar la Misión, llevándola a algo más grande o más importante. La Visión impulsa la expansión o la mejora de la Misión.
Los Principios y Reglas corporativos de nuestra empresa, deberían ser los que nos proveen de un marco de referencia amplio, pero claro, de actuación, para todos los involucrados en el proceso de creación de valor, de cada una de nuestras marcas. Son como los caminos o medios, válidos y permitidos, por los que es deseable transitar, y que, conjuntamente con los Valores personales, que son deseables tener para ser parte de la compañía, nos llevarán por la buena senda, a actualizar nuestra Misión, logrando alcanzar las distintas Visiones que en cada momento nos inspiren los líderes de nuestra organización.
Este sistema integrado y abrazado de Creencias y Convicciones Compartidas, influyen decisivamente en el comportamiento de nuestros colaboradores, nos orientan y determinan. Dan cuenta de cómo se perciben e interpretan los problemas y cuál es el modo correcto de tomar las decisiones en nuestra empresa.
El Propósito de nuestra Empresa, debe concentrarse en cómo concretaremos, con hechos significativos y percibidos por nuestros consumidores, la razón de ser de nuestros productos, como medios para satisfacer las necesidades, sobre todo de aquellos consumidores que necesitan imperiosamente, mejorar su calidad de vida y sentir que la marca contribuye a mejorar el mundo en que vivimos, mientras nosotros nos comprometemos a elegirlos por ese compromiso.
El Propósito, es también parte del rol de tomar conciencia, que debemos abrazar una causa justa, que esté en línea con nuestros bienes e invitemos a todos a sumarse a contribuir con el desarrollo social, ambiental, cultural, económico y de urgencia temporal, que nuestros productos deben cumplir a lo largo de toda nuestra cadena de valor, para dejarle un mundo mejor a los que vienen, del mundo que nos legaron los que nos antecedieron.
Nuestra Cultura Organizacional, estará marcada por comprender que la gente no comprará lo que hagamos, sino la causa por la cual lo hagamos. No comprará solo por los atributos de nuestros productos, sino también por las relaciones que seamos capaces de conseguir con las comunidades donde operamos.
El Propósito de nuestras Marcas, en armonía con nuestra Cultura y su percepción, medida no solo por nosotros, sino fundamentalmente por los otros, será la que, con el paso del tiempo, la sensatez y la coherencia, irán construyendo esa Identidad que nos diferencie y nos distinga como empresa.