Durante el viaje de la pareja, la música se revela siendo un importante elemento de identidad cultural. Personajes reales que viven de y para la música, muchos encontrados de casualidad, llevan a Iris y Lucas a un viaje paralelo al de las rutas del mapa, haciendo uso de las sonoridades locales, los instrumentos perfeccionados a lo largo de generaciones, las tradiciones y dinámicas sociales de cada región.
La serie capta la efervescencia musical de cada localidad a través de la mirada y perspectivas de Iris y Lucas. Notas, arreglos y melodías se mezclan, expresan peculiaridades y presentan consigo personajes emblemáticos como músicos, artistas callejeros, comerciantes de instrumentos, luthiers e amantes de la música que se cruzan con la pareja y hablan a las cámaras.
Íris y Lucas anduvieron con un grabador de audio sensible, captando los sonidos de las calles en audio binaural, que transmite la sensación de que el oyente está presente en el momento de la grabación. Al final de cada episodio, una banda o músico invitado graba el track que cierra la misión en aquel país. Son composiciones originales resultado de las experiencias y el aprendizaje en cada etapa del viaje.
En el primer episodio, la pareja va a Ámsterdam. Luego de algunas decepciones y problemas de adaptación al horario, encuentran a un saxofonista tocando en un barco anclado en uno de los famosos canales que cortan la ciudad: Se trata de Lior Horst, el primer personaje.
Luego, en un local de instrumentos antiguos donde las visitas tienen horario fijo, la pareja conoce a Soren Venema, su dueño. No tan simpático en un primer momento, Soren descubre la pasión de Lucas por la música y el trío se entrega a una animada charla sobre comunicación universal por medio del sonido.
Al final, la banda local The Pheronomes graba el track holandés del álbum, Autour du Monde, con la presencia exquisita de una guitarra tenor de la década de 1920 comprado en el local de Soren, y del sax de Lior.
En la semana siguiente, en Berlín, Iris y Lucas van al karaoke de Mauerpak, una fiesta semanal que cuenta con la presencia de mucha gente que prestigia a músicos profesionales y amateurs. Allí, conocen a la cantante Alice Phoebe Lou quien grabará el sonido del proyecto y das Friedel, quien hace la base en beatbox.