El spot juega con la idea de los peligros que el público comúnmente asocia a un día en la playa y le da un giro inesperado, utilizando una referencia conocida para el público objetivo.

“En términos de estrategia, el mensaje central es la prevención. En este caso, tratándose de cáncer de piel, el foco de la comunicación era convencer a la gente de usar bloqueador”, comenta Gino Bernabè. “En cuanto a la creatividad", continua André Toledo, "nos basamos en un insight sencillo: cuando vamos a la playa acostumbramos pensar que los mayores peligros están en el mar. Sin embargo, el verdadero peligro es el sol, como tristemente demuestran las estadísticas nacionales sobre la incidencia del cáncer de piel”.

Mención aparte merece la musicalización del spot, a cargo de Kazoo, que en este caso, más que acompañar las imágenes, se convierte en un protagonista de la historia. El spot, filmado por Mikael Stornfelt de Chita Films, contó además con la supervisión del Director Creativo Ejecutivo, Flavio Pantigoso.