Se terminó la fiesta de Iberoamérica, pero lejos de dejar desordenes en la casa, dejó muchas reflexiones y por sobre todo, aprendizajes. Ahora, comienza otra fiesta, la de los convivio y la que si, posiblemente deje algunos desordenes en las casas, pero es natural…
La primera reflexión que deja un certamen como éste, que es el nuestro, el de los de habla Hispana, es la distancia que queda el Sur de Centroamérica y no me refiero a la cantidad de millas, sino a la distancia que hay entre una publicidad y otra.
Hablo de distancias que no pasan solo por la “Creatividad”, hablo de las distancias que existen en lo conceptual, en lo profundo del pensamiento Creativo, ese que va de la mano -por supuesto- del pensamiento del cliente. Queda claro que para hacer Creatividad se necesita mucho más que un buen Brief, se necesita un partner (cliente) que esté tan loco como vos, que tomen el riesgo junto con la Agencia.
Una de las charlas más lindas que escuche, fue en la que se hablaba de la necesidad de equivocarse para alcanzar el éxito. Equivocarse, es tomar riesgos, es jugar en el mismo equipo con el cliente, es compartir las culpas, es transpirar la misma camiseta, es mirar al objetivo, juntos, es en definitiva, trabajar desde el brief, juntos.
Por qué en Brasil entierran un Bentley como parte de una campaña a favor de la donación de órganos o como le cambian el color de la playera a un equipo de fútbol a favor de la donación de sangre y Centroamérica no vemos ese tipo de cosas?
Centroamérica viene año a año creciendo en todos los Festivales Creativos a nivel Mundial y creo que debemos Saludar a todas esas Agencia que año a año ubican y agrandan a Centroamérica en el mapa, pero aún falta… falta dejar de ver referencia a nivel mundial y comenzar a trabajar con el objetivo “entre ceja y ceja” y que quede claro que no me refiero al “Objetivo” como un premio, me refiero al gran objetivo que son las ideas que son tan grandes como relevantes para que sobresalgan y que hacen que la gente se enamore y que si gana un premio, mejor aún, pero tengamos claro que para ningún cliente el Objetivo es el premio.
Otra de las reflexiones que me dejó este año esta fiesta, es que vi muy pocos "trajes hechos a medida para la fiesta”. No es muy atractivo viajar tantas millas para ver los trabajos que vimos hace ya mucho tiempo en la Web, me refiero que es mucho más rico poder -quizas- hablar del proceso que llevó ese trabajo y no como algo que “hicimos en la Agencia y ganó Cannes"
Fue muy interesante escuchar en la manga que te lleva al Avión de regreso, a dos “publicistas” (que no sabiendo que uno es Publicista también) criticaban las piezas de otra Agencia que habían ganado y que quede claro que no tenían que ver con ideas de mi Agencia -porque no ganamos-, y ahí es cuando uno se pregunta: Por qué? Porque no se te ocurrió a vos?