La campaña está compuesta por un spot y tres anuncios sobre el concepto: “Cuando vos mandás un mensaje de texto a un conductor, te estás convirtiendo en un peligro”. En todas las piezas vemos personas que están mandando mensajes de texto en determinado contexto, pero cuya imagen se lleva a la del universo del automóvil con el fin de crear un contraste llamativo.
En el comercial vemos a un hombre sentado en un inodoro mandando mensajes de texto con el celular. Pero este inodoro se mueve rápidamente, a la velocidad de un auto, por una carretera. De repente frena en una curva. En la secuencia vemos a un conductor en la mano contraria, escribiendo en su celular mientras maneja. Entonces tiene que frenar bruscamente para no chocar con su amigo sentado en el inodoro en el medio de la carretera.
En el trabajo impreso vemos un operador mandando mensajes de texto por celular al lado de una máquina fotocopiadora en el medio de una curda de una carretera, una mujer sentada en una silla en el medio de un túnel, y un hombre sentado en un probador en el medio de una carretera cubierta de nieve.