Así, cada uno de los colaboradores de los locales tuvo la oportunidad de escoger el plato peruano de su preferencia dentro de un menú de tres opciones que caracterizado por ser "bien taypa" y fresco, como la icónica hamburguesa Whopper. Los almuerzos fueron proporcionados por pequeños locales como "Doña María”, "El menú de Aurora", "La cocina de Luis", "Pollería Tavito", "Sabor Sazón" y "Tulpa", entre un total de 20, que efectuaron 400 entregas.

De este modo, la cadena de fast food fue contra su naturaleza de proveedor de comida y apuntó a reconocer a sus cientos de trabajadores de primera línea, además de apoyar a diferentes pymes locales para ayudarles a sobrellevar la crisis ocasionada por el Covid-19 y reactivar un talento humano esencial.

"Estamos conscientes de que ser solidarios es clave para salir adelante como país, de que hay que mantener vivas sus delicias, especialmente entre nuestros colaboradores, que son nuestros héroes de primera línea. Gracias a ellos nuestras parrillas siguen encendidas, cocinando las mejores hamburguesas para todos los peruanos", comentó Miluska Jiménez Espinoza, Gerente de Marca de Burger King.

“Burger King es una marca significativa en la vida de los peruanos y para incrementar ese vínculo buscamos una idea que le permitiera a la compañía mantener su tono disruptivo y, además, demostrar su compromiso con la economía local al valorar a aquellos que comparten una de sus principales características: la comida fresca”, agregó Christian Caldwell, CCO de McCann Lima.