Aún con el eco de la especial noche de los Premios Eficacia vienen a mi mente distintas reflexiones que he tratado de expresar a través de las siguientes líneas. Por los salones del Teatro Real vi desfilar a compañeros que lucían orgullosos sus trofeos, que se daban la enhorabuena y que alababan sus casos y sus claves. Pero hoy, que la burbuja de la celebración empieza a quedar atrás, es cuando me pregunto si la eficacia dura mucho más que una noche.

Porque para mí la eficacia es un mindset permanente, especialmente cuando hablamos de crear campañas y construir marcas. Es cierto que cuando llega la primavera, los premios Eficacia nos dan la oportunidad de volver a reencontrarnos con la prueba de que hemos hecho un buen trabajo, ahí radica el valor de documentar ese éxito: te obliga a reconectar con tu campaña de nuevo, a mirar con perspectiva y otros ojos el trabajo y el esfuerzo que se hizo en su momento.

Auditoria honesta

Porque escribir es una auditoría honesta. Te muestra qué hiciste bien, qué podrías haber hecho mejor y te recuerda por qué tomaste cada decisión. Esa revisión anual, en mi experiencia es lo que renueva la ilusión.

Renueva echar la vista atrás, y darte cuenta de que hace cinco años, lo que parecía una simple palabra, acento, y apostar por resignificarla fue la base de un viaje con el que se ha conseguido que Cruzcampo y Andalucía sean un match lleno de poderío.

Pero esta renovación no se limita al largo plazo; se manifiesta también en el corto, en los detalles y en nuestra constante capacidad de reinventarnos. Prueba de ello fue el reciente desafío navideño con Suchard, superar el éxito de campañas previas y destacar en uno de los periodos de mayor saturación publicitaria. Lo logramos, no solo con una idea que conectó profundamente con la gente, sino entendiendo el papel estratégico de los medios para hacer tangible esa magia navideña.

Evolución del sector

Un caso Eficacia también nos permite constatar la evolución del sector. Lo que observo es una creciente unión: hemos comprendido que, por fin, hemos dejado atrás los silos. La estrategia requiere de la creatividad para potenciar las ideas, y los medios son indispensables para hacerlas realidad. Hemos entendido que vivimos en un ecosistema cada vez más complejo y exigente, donde la atención se reduce a la misma velocidad que aumentan las expectativas, por eso ya no vale solo con saber qué contar; hay que dosificarlo para aportar valor en cada punto de contacto.

Solo cuando todos trabajamos de la mano no solo logramos ser eficaces, sino que podemos demostrarlo. Es por esto por lo que los Premios Eficacia, además de ser una celebración necesaria, también son la consecuencia natural del trabajo bien hecho a lo largo del año.