Protagonizada por una muñeca de madera que cobra vida después de estar expuesta en la vidriera por un año. La comunicación pretende celebrar al gigante del fast food como el lugar ideal para tener buenos momentos y comer, después de un día agotador de compras para las fiestas.
“Juliette the doll” muestra a la muñeca destinada a pasar otra Navidad sola, en una tienda de juguetes. Pero Juliette se escapa a un restaurante de McDonalds donde su suerte cambia.
Los juguetes del spot fueron hechos em 3D y Juliette fue traída a la vida por medio de una mezcla de marionetas y CGI (Computer Graphic Imagery). Todos sus detalles faciales fueron pintados a mano.