El objetivo de la comunicación es hacer un homenaje, según se explica en el spot: “a aquellos que con su esfuerzo hacen que cada día disfrutemos del mejor desayuno”. Con un carácter documental, el spot gira en torno al día a día de cuatro panaderos que nos hacen una reflexión sobre su dura profesión y la pasión que sienten por ella. Como muestra de agradecimiento, Nutella les hace llegar un bote personalizado con su nombre. El resultado es un emotivo anuncio que muestra la cara más humana de la marca.

RCR ha sido la productora encargada de realizar el proyecto, bajo la dirección de Gabi Martín. La logística del rodaje fue complicada debido a la naturaleza del trabajo de panadero, un trabajo nocturno que se lleva a cabo de lunes a domingo ininterrumpidamente. Después de un extenso casting de panaderías que transmitieran los valores artesanales que se querían plasmar y que pudieran albergar un equipo de rodaje, cuatro fueron las seleccionadas. La producción se llevó a cabo de noche y se repartió en dos jornadas.

En el día de lanzamiento, la campaña se apoyó con una acción de brand day en YouTube y con colaboraciones con distintos bloggers. Además, se llevaron a cabo diferentes materiales y acciones para panaderías, como pósters y bolsas para pan.