Ayer fue un día que pasará a la historia como el Día más importante del Marketing. Toma a un hombre relativamente desconocido. Más joven que sus oponentes. Negro. Con un nombre que suena mal. Oponente de la mujer mejor posicionada de Estados Unidos, relacionada con el político más exitoso de la historia reciente. Su segundo oponente: un héroe de la guerra, senador reconocido. "Cambio", ese fue el mejor slogan y la mejor estrategia que pudieron haber creado para Obama. Hillary Clinton, por su parte eligió la "experiencia" hasta que vio los progresos de Obama y prefirió "cuenta regresiva para el cambio y finalmente se quedó con "Soluciones para America." Nadie recuerda cuál fue su slogan. Por otro lado está John McCain. Siempre asociado a lo conservador. Héroe. Concialidor. Patriota. Por eso eligió el slogan "El país primero", pero fue demasiado tarde y no alcanzó relevancia. Los dos oponentes de Obama se focalizaron en "Yo puedo hacer cambios mejor que mi oponente." "Mejor" nunca funciona en marketing. Lo único que funciona es "diferente." La campaña de Obama tiene mucho para enseñarle a toda la comunidad publicitaria. 1. Simplicidad. Cerca del 70% de la población cree que el país va en la dirección equivocada desde que Obama se focalizó en el "cambio". ¿Por qué los otros no lo usaron? La idea del cambio parece demasiado fácil de vender. Todos buscan lo más inteligente. 2. Consistencia. El objetivo de Obama no era comunicar que sería el agente del cambio. Lo que Obama hizo fue hablar del cambio en cada mensaje. En la sobrecomunicada sociedad de hoy, la repetición es la clave. 3. Relevancia. Obama logró que sus oponentes le dedicaran tiempo a sus propias campañas hablando de sus propios cambios. Por todo eso quizás Obama fue elegido Advertising Age's Marketer of the Year. Fuente: AdAge.