La película comienza con escenas de un amanecer junto al mar, en una playa vacía. En la secuencia, se ve a un hombre admirando el paisaje del amanecer. Paralelamente, la voz en off presenta un texto que describe el contexto de la realidad de todos los trabajadores, con los problemas y las oportunidades que surgen en el día a día, los altibajos en los "días en los que todo sale bien y los otros en los que no sale nada" o "los días en los que todo sale bien o el día en el que sólo quieres que se acabe".

"El reto para el director de escena Kiko Lomba era traducir la palabra esperanza en imágenes, para llevar un sentimiento de positividad al corazón de la gente. La escena del empresario mirando al horizonte representa a millones en nuestro país y la esperanza de que vendrán días mejores", dice Telma Reis, socia y directora comercial de Madre Mia Filmes.

Al final, una letra con un primer plano de la cara de un hombre sonriente resalta el mensaje de optimismo con las frases "Vienen 365 días nuevos". En cada una de ellas, seguiremos estando a su lado".

"Después de un año de tantos desafíos para los micro y pequeños empresarios, la marca Sebrae quiere reforzar su propósito de transformar las pequeñas empresas en protagonistas del desarrollo sostenible de Brasil. Es un mensaje de esperanza, de fuerza y de que hay que creer siempre. Y nosotros, en el Sebrae, estamos aquí para creer, junto con los empresarios brasileños, que vendrán días mejores", dice Luiz Aurélio Alzamora, gerente de comunicación del Sebrae Nacional.

Al reforzar el concepto "La fuerza del empresario brasileño" en su campaña de fin de año, además de transmitir un mensaje de esperanza, el Sebrae también refuerza su misión de estar siempre al lado de los empresarios brasileños, mostrando asociación, unión y apoyo tanto en los momentos de dificultades como en la celebración de los logros.