A continuación, la nota con Pepe Aguilar:
-¿Cómo se da su paso a Grey Perú?
-Mi historia con Grey tiene ya algunos años. Primero en Grey México, como director creativo de grupo desde el 2003. Además, Grey como red es bastante proactiva para impulsar y hacer crecer a su gente. Fue así como llegué a director general creativo de Maruri Grey en el 2006. Mi traslado a Perú es el siguiente paso en una relación muy satisfactoria con Grey regional y que espero dure muchos años más.
-¿Cómo ve a Grey Perú?
-Grey Perú tiene mucho potencial de crecimiento, tanto en el aspecto creativo como en el de negocio. Cuenta con gente muy talentosa, y como director general creativo, seré parte del relanzamiento filosófico de la agencia para lograr metas más ambiciosas en términos de reconocimiento y crecimiento. Como país, Perú se encuentra en un momento económico privilegiado y es el tiempo ideal para apostar por su éxito.
-¿Cómo vive este proceso desde lo personal y lo profesional?
-Perú me encanta y tengo muchas expectativas por vivir allí. En el pasado lo he visitado como turista y también por trabajo. Me gusta la gente, su comida y su historia. Soy fan del imperio inca. Tengo sentimientos encontrados acerca de dejar Ecuador, pues la ilusión de alcanzar nuevas metas no resta el dolor de alejarme de un país que me recibió con los brazos abiertos y que ha sido mi hogar los últimos cuatro años. Una parte muy importante de mi vida y carrera serán siempre de Ecuador.
-¿Qué balance hace del 2009 y lo que va del 2010 para Ecuador?
-En Ecuador la crisis se sintió un poco tarde. Desde el final del 2009 y lo que va del 2010, ha sido una época lenta con decisiones de inversión cautelosas. Sin embargo, parece ser que la maquinaria empieza a moverse y que la economía regresa poco a poco a la normalidad. En lo que respecta al negocio, veo que la publicidad está cambiando a pasos agigantados. La migración de medios masivos a medios electrónicos, que ya hemos visto, es apenas la punta del iceberg. Lo que hoy es ley, mañana será un recuerdo. Yo creo que el desafío es mantenerse al día y muy atentos a los cambios. Estamos en plena etapa de mutación y el proceso de selección natural va a hacer que muchos gigantes se extingan y que nuevos participantes se conviertan en líderes del mercado.
-¿Qué cree que le hace falta a su país para lograr una identidad creativa propia?
-La identidad creativa de un país siempre va de la mano con la fuerza de la identidad de su gente. En ese sentido Ecuador es víctima de su propia historia, ya que alguna vez fue parte de la Gran Colombia y hasta la fecha, conserva muchos rasgos que son parte de otros países. El orgullo por su propia esencia va creciendo y definiéndose cada vez más, pero es un proceso que toma tiempo en madurar.
-¿Qué cambios ha notado en el consumidor ecuatoriano en los últimos años?
-Lo más importante es darse cuenta que el consumidor que no entiende ya no existe. Basta de comunicación pre-digerida para tontos. Ecuador es un país donde predominan los jóvenes expuestos a información las 24 horas y sedientos por descubrir más. Maruri es una agencia que siempre ha creído en las ideas y es un principio que compartimos con la mayoría de nuestros clientes.
-¿Cuál es el balance de su empresa del 2009?
-Nuestra satisfacción más grande del 2009 es que fuimos la agencia número uno en el ranking creativo (según el puntaje realizado por la revista Markka). Aunque localmente no pasó gran cosa, fuimos la agencia con más premios internacionales: 7 en el Festival del Caribe, 1 Fiap y 1 El Ojo de Iberoamérica. En cuanto a clientes nuevos, entre Maruri Guayaquil y Quito, recientemente hemos ganado las cuentas de San Marino, Quicentro, Quicentro Sur, Arcopharma, Don Diego, Cámara de Comercio de Guayaquil y un par más que aún no puedo revelar. También hemos crecido con nuevas e importantes cuentas de nuestros clientes Toni y LaFabril.