En su estrategia comercial apuesta por las sesiones sueltas, para darte la libertad de depilarte cómo y cuándo quieras, sin la obligación de estar atado a un bono que te obliga a un número de sesiones fijas. Por eso, en común con el equipo de la marca, coincidimos en que el camino tenía que ser la libertad: la libertad de hacer lo que quieras con tu cuerpo y con tus pelos. Pero no queríamos hablar de libertad en plan solemne y filosófico, sino de una forma más fresca y desenfadada. Y dimos con un concepto juguetón y pegadizo, de esos que tanto nos gustan en la agencia, que era perfecto para transmitir el mensaje: “Me viene al pelo”.

Un concepto que hemos convertido en canción, para hacerlo aún más memorable. La producción de la pieza audiovisual, a cargo de Instinto Films y su director Mariano Schoendorff, también la hemos planteado de forma muy libre y espontánea, rodando en formato cine 16 mm., que es algo bastante infrecuente hoy, pero le ha dado al spot un look muy diferente.

La campaña está en el aire desde la semana pasada y consta de piezas audiovisuales para digital y RRSS, además de radio, gráfica y exterior.