-¿Qué balance hace de la productora en 2014 y lo que va de 2015?

-2014 fue un año que terminó con saldo positivo, registramos a la productora en República Dominicana y en Panamá, y ya están dando sus frutos. En 2015 estamos poniendo mucho entusiasmo en la captación de clientes en el Caribe y Centroamérica.

-¿Cómo definiría el perfil de su productora hoy, como está organizada y qué tipo de servicios ofrece?

-Soda está próxima a cumplir 17 años, estos años sin duda han sido y son de un constante aprendizaje. Pasaron muchos profesionales que se formaron con nosotros, y eso nos enorgullece. Somos un marco de referencia, tanto en producciones internas, como en los servicios de producción extranjeros, por tener un gran sentido de responsabilidad y compromiso con lo que se ofrece y lo que se materializa. Nuestra constante pasa por ver el vaso medio lleno, a pesar de las dificultades y entender que a pesar de las crisis, el buen servicio debe ser la premisa. El sumar jóvenes talentos a Soda es un riesgo que nos gusta asumir, siempre resultó en cosas positivas.

-¿Cuáles son los principales proyectos de la productora para 2015?

-Apoyar a nuestros jóvenes directores en un laboratorio de ideas, donde se están gestando interesantes contenidos. Empaparnos cada día más en el contenido digital y, como mencionamos anteriormente, darle mucho empuje al mercado de Centroamérica y el Caribe, seguir ofertando a Soda como una excelente plataforma de producción para las productoras extranjeras y, por supuesto, seguir atendiendo nuestro mercado natural.

-¿Cuáles son los principales desafíos de las compañías de producción audiovisual hoy?

-Diversificarse en cuanto a los servicios a ofrecer y tener claro que los medios tradicionales están dejando de ser los medios de los volúmenes.

-¿Cómo ve al mercado de Servicios de Producción Audiovisual en su país?

-Estamos acostumbrados a dar servicio de producción a países como Argentina, México, Brasil, Colombia, entre otros. Productoras de gran renombre como Rebolucion siempre repiten y esa es una buena señal. Podemos brindar costos muy atractivos, por debajo de cualquier otro país de la región y, a pesar de no tener la mejor imagen en el escenario político, el personal es calificado, el clima estable y existe una gran diversidad de casting y locaciones.