Se está empezando a notar el cambio que comenzó hace un tiempo en el mercado publicitario peruano. Este cambio, a mi criterio, se dio cuando una nueva generación de gerentes (jefes de marca), con una visión más contemporánea y más humana de la publicidad, empezaron a manejar marcas muy importantes y le transmitieron a sus competidores que se puede implementar una buena comunicación en cualquier categoría. Tal es el caso de Ernesto Melgar que estuvo a cargo del BCP, Luis Eduardo Garván de Movistar, Bernardo Leonen de Sab Miller, Luciana Olivares del BBVA, Miguel Merino, ahora también de Sab Miller, que apoyó la campaña de McCann que este año fue Gran Prix en Cannes, Guillermo Barclay de La Tinka, Isabella Falco de Promperú (marca Perú), que tiene como lema “No al miedo”. Juan Pablo Klingenberger de San Fernando, que ganó el gran Effie con una campaña creativa desde todos los puntos de contacto, incluso digital. Varios de ellos han trabajado en agencias y han vivido del otro lado.
Muestran pasión a la hora de crear buena comunicación en equipo y saben que la creatividad es indispensable para lograr buenos resultados. Otro cambio que se empezó a gestar en las agencias fue la descentralización del talento creativo. En la última edición de Cannes, cinco agencias subimos a recibir premios. Esto es la prueba del trabajo silencioso que muchas agencias -incluidas agencias digitales, casas realizadoras y centrales de medios-, hemos estado haciendo al mismo tiempo con un objetivo común. Ya no son dos o tres agencias trabajando por hacer buena comunicación, somos más agencias ahora las que ofrecen un producto creativo competitivo y eso está bueno para todos. Cada vez más agencias y más clientes estamos yendo juntos al festival. Se está creando una cultura. Esto confirma que los cambios profundos parten primero de la gente, gente con nombre y apellido que tiene una visión y luego como esta visión es compartida y apoyada.
En Publicis Perú, en equipo con Álvaro Florez Estrada, hemos venido trabajando en esto hace varios años y ya se sienten los resultados, el año pasado quedamos finalistas en Cannes con Slice of Love, una idea para Papa Johns que le proponía a la gente donar dos pedazos de pizza para la gente que no tenía que comer. Además, hicimos una idea de promo para Pilsen que empieza en digital y termina en direct. El Ramo Pilsen proponía que en el día de los enamorados la gente enviara un ramo de cervezas en lata con un packaging especial. A través de un delivery, la marca les enviaba el ramo de cervezas, en vez de un ramo de rosas. Tuvimos excelentes resultados con todos nuestros clientes y ese clima de confianza es lo mejor que puede pasarnos a la hora de vender una buena comunicación. Y claro, los resultados en Cannes con la gráfica de La Tinkano no pudieron ser mejores, es una alegría para mi equipo haber traído el primer león de oro a esta agencia, aunque no debemos parar de trabajar. La resaca ya pasó y ahora hay que volver al trabajo, pero con esta sensación súper positiva. Perú está empezando a demostrar que no sólo es extraordinario preparando comida y corriendo olas, sino también haciendo buena comunicación.