“¿Cómo te hace sentir? ¿Incómodo? ¿Avergonzado? ¿Cómo si quisieras salir corriendo de un lugar cuando alguien te empieza a hablar de su período menstrual?”, son algunas de las preguntas que plantea WaterAid en su sitio web como disparadoras de la campaña. “Ahora imaginate cómo te sentirías si, en lugar de las mujeres, fueran los hombres quienes viviesen esa situación”, amplió la organización.
Según WaterAid, son seis las maneras en las grandes diferencias que existirían entre hombres y mujeres:
1- El sangrado mensual sería un signo de hombría
Si los hombres tuvieran sus períodos, no sería algo incómodo ni vergonzoso, sino que serían signos de poder y la virilidad. Los hombres serían presumidos entre ellos alrededor del dispenser de agua, y se acariciarían unos a otros para la superación de una agotadora batalla mensual contra la naturaleza.
2- La "llegada" sería una celebración
A diferencia de las mujeres, los hombres que menstrúan no serían excluidos de los lugares de culto. En su lugar, los períodos serían celebrados por las religiones de todo el mundo con ceremonias especiales para conmemorar el primer período de un niño y dándole la bienvenida a la edad adulta.
3- Los períodos serían llamados… períodos
En Bélgica, “María se encuentra de visita". En Francia , es "temporada de fresas”. En Finlandia , es “semana de jamón, mientras que en el Reino Unido es una “visita de la tía Flo”. Pero si los hombres menstruasen, los eufemismos quedarían apartados y un período sería un período.
4- Los deportistas tomarían sus períodos en serio
Los deportistas y sus períodos se convertirían en poco menos que una ciencia, con entrenadores incentivando a los compañeros de equipo a que vivan juntos para coordinar sus ciclos antes de un gran partido.
5- Los artículos sanitarios sería un derecho
Olvídense de colocar impuestos a los productos sanitarios como si fuesen artículos de lujo. Estarían incluidos en los paquetes de ayuda internacionales junto a los alimentos, el agua y las medicinas, porque "ningún hombre debería sufrir la indignidad de no recibir el apoyo higiénico adecuado”.
6- Los anuncios sobre tampones serían más poderosos
Digan adiós a los extraños líquidos azules. En cambio, los hombres harían cola para probar el último tampón triple moldeado y diseñado por los mejores científicos.
Todo esto puede parecer gracioso e, incluso, ridículo, pero lo cierto es que miles de niñas y mujeres carecen del agua limpia y segura que necesitan para higienizarse durante sus períodos.