En un país en el que casi un tercio de la población se sitúa en la franja etaria de 12 a 29 años (según datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía), la presencia o ausencia de un enfoque optimista en las generaciones más jóvenes adquiere relevancia en el desarrollo social y cultural.
Ante este contexto, la herramienta YouGov Perfiles revela que solo un poco más de la mitad (54.9%) de los ciudadanos mexicanos de entre 18 y 24 años está de acuerdo que la vida es ahora más incierta que para las generaciones anteriores. El porcentaje entre mayores de 55 años sube a 70.6%.
En otro tema relacionado se observa que, si bien hay una gran unanimidad en todos los sectores que la epidemia de COVID aún no ha acabado, entre los jóvenes es más amplia la opinión de que la epidemia terminó del todo, con un porcentaje de 14.2%, casi el doble de la población general, que se mantiene en 8.9%.
Los datos obtenidos por la plataforma no sólo habilitan una comprensión más profunda de las percepciones generacionales, sino que también revelan las percepciones de los distintos grupos etarios sobre el futuro del país. En este sentido, los datos sugieren que en algunos rubros, los jóvenes son menos optimistas del futuro que otros rangos de edad.
El futuro en duda
En contraste a la visión del presente los jóvenes mexicanos se sienten en menor control del futuro que el resto de la población.
Solo el 54.9% de los jóvenes cree que tiene el poder de influir en cambios importantes del país, frente al 64.9% de la población general.
Entre los mexicanos mayores de 55 años el porcentaje es aún mayor, alcanzando un 72.2%.
Este sentimiento de falta de control también se extiende a escala individual
29.7% de los jóvenes aseguran que no pueden hacer mucho para cambiar su vida.
Mientras, solo 20.2% de los mayores de 55 años creen lo mismo.
Entre la población en general, el promedio también es menor: 24.2%.
Es digno de mención que menos de la mitad de los jóvenes se siente segura y entusiasmada por lo que le depara el futuro. Esta cifra es aún más llamativa si se considera que en todos los grupos de edad, incluyendo el promedio nacional, el porcentaje de personas que está emocionado y seguro respecto al porvenir está por encima del 55%.
La postura de los jóvenes ante los temas que son tendencia
Analizando la mirada de los más jóvenes frente a ciertas tendencias, desconciertan algunos datos que no resultan como se podría esperar, tales como:
IA y el futuro del trabajo: El 56.2% de los encuestados de 18 a 24 años cree que la IA contribuirá de manera significativa a aliviar la carga de las tareas humanas. A nivel nacional, un 63.6% comparte esta creencia. Esta diferencia podría revelar una perspectiva más cautelosa entre los jóvenes, posiblemente influenciada por la incertidumbre y la necesidad de entender mejor los alcances de la tecnología en sus vidas.
Criptomonedas: En lo que respecta a las criptomonedas y su potencial como el futuro de las transacciones en línea, los jóvenes mexicanos también muestran una cierta reserva. El 35% de los encuestados en este grupo de edad visualiza las criptomonedas como el próximo estándar en transacciones en línea, frente a un 40.9% de los adultos entre 45 y 54 años que mantiene una postura más optimista. Esta disparidad refleja las diferentes actitudes y grados de familiaridad con esta forma emergente de intercambio financiero.
Sostenibilidad: A pesar de lo que se podría pensar, en el ámbito de la sostenibilidad los jóvenes son menos optimistas que los mexicanos de mayor edad. Un 61.2% de los jóvenes ve a la energía verde como el próximo paso en el sector, en contraposición al 73.5% de los adultos mayores de 55 años. Similarmente, en relación con los coches eléctricos, solo un 56.7% de los jóvenes confía en su potencial futuro, en comparación con un sólido 78.7% de los mayores de 55 años.
Los resultados subrayan la importancia de comprender las diferencias de perspectiva generacional en la adopción de tecnologías y propuestas comerciales. Estas percepciones proporcionan valiosos insights para las empresas y líderes que buscan adaptar sus estrategias para resonar con una amplia gama de grupos etarios y para fomentar una comprensión más profunda de las tendencias emergentes.