Bajo el concepto “Todos tenemos un Dakar”, la campaña tiene como protagonistas a 4 mujeres de Argentina, Brasil, Colombia y México que están al frente de sus propios emprendimientos y que luchan contra el maltrato animal, la violencia en las calles, la ecología y la sustentabilidad. Todos estos emprendimientos conllevan un desafío tan grande, como lo es correr un Rally Dakar, la competencia por excelencia sinónimo de obstáculos y dificultades que con sólo llegar a la meta, llena de gratificación a todos sus participantes.

A través de ellas, la idea es inspirar a las personas de todas partes de Latinoamérica a que corran su propio Dakar y motivarlos a que lleven adelante esos proyectos que van a hacer la diferencia en nuestras sociedades.

La campaña contó con la DGC de Fabio Mazía, la DC de Paula Kozub e Ignacio Jardón, y la realización de 1985, colectivo integrado por los directores Tomás Quartino y Francisco Colombatti, de Landia.