Es un punto de inflexión para la marca. Una revolución en la industria del automóvil.

"R5volution is a french thing", dirigida por Sebastian Strasser y producida por Henry, cuenta esta historia. A través de un viaje épico, seguimos a un hombre que escala una montaña gigantesca hecha de viejos coches Renault. La propia montaña representa lo que la marca (y más en general toda la industria del automóvil) solía ser: coches térmicos, contaminantes, sin materiales reciclados. La difícil ascensión ilustra lo difícil que es hacer una revolución de este tipo en la industria. Pero cuando por fin llega a la cima, descubre lo que hay al otro lado: un coche que representa un nuevo mundo automovilístico: eléctrico, digital, lleno de recursos. El nuevo Renault 5.

La montaña se creó ensamblando 120 coches Renault desguazados que se encontraron por toda Argentina. Tenía 10 metros de altura y 3 lados escalables. Como un auténtico juego de Tetris, se ensamblaron con verdadera atención a las formas, los colores y las partes de la estructura que permitían hacer acrobacias impresionantes. El actor principal fue supervisado y doblado por un director artístico de "Le Cirque du Soleil".

Se utilizó CGI para extender la montaña alrededor de la estructura real, aportando poesía y magia a este mundo. Se utilizaron más de 72 modelos 3D de Renault. Lipstick, la empresa de postproducción, tuvo que crear entonces una herramienta específica de efectos visuales que les permitiera apilar los coches de forma orgánica y calibrar la cantidad de daños, óxido o partes que faltaban en los coches.