Para que pareciera que la producción "sudaba", se colocó un mecanismo hidráulico con pulverizadores en el interior de la estructura.
"Quisimos que los OOH estuvieran en zonas urbanas muy transitadas para dar la impresión de que estos medios también sienten los efectos del sudor y el mal olor en la piel, entablando un diálogo con la gente sobre las molestias causadas por la transpiración. La acción forma parte de la campaña "Protección que lo cambia todo", que presenta esta visión del consumidor que busca un antitranspirante que pueda ser decisivo en los momentos de tensión de su vida", explica Viviane Ramos, Directora de Marketing de Desodorantes de Unilever.
Además, también se desarrollaron piezas de publicidad digital para amplificar el mensaje en diversos puntos de las ciudades.
Innovación - Brasil
Cuentas - Brasil
Cuentas - Brasil