En Colombia se roban 1.4 millones de celulares al año, 4500 celulares cada día y mueve casi US 500.000. Igual de preocupante que estos datos, es el hecho de que en Colombia exista un número similar de colombianos dispuestos a comprar celulares robados. La campaña está dirigida justamente a ellos. Los que no tienen ningún escrúpulo en pagar por un celular a sabiendas de que es un celular robado. “A ellos les queremos recordar que cerca de uno de cada mil robos termina con la víctima muerta o en grave estado de salud. (Hasta el momento han muerto aproximadamente más de 1.400 personas)” explicaron desde la agencia.

“Comprar un celular robado es cargar con un muerto. La idea nace de una verdad. Cuando una persona quiere comprar una casa o un carro que le encanta, dan un paso atrás en su deseo de tenerla si se enteran que en ella asesinaron una persona”.

“La mayoría de las personas no comprarían algo de una persona que fue asesinada, entonces ¿por qué si compran su celular? Ese racionamiento es el que quisimos explotar en el desarrollo creativo atando el celular a la sangre y la muerte que tiene la historia de todo celular robado. Queremos que el comprador de un celular robado sienta la culpa y el miedo que debe tener por ser parte de un delito tan atroz como un atraco a mano armada o un asesinato” concluyó el equipo que trabajo en la campaña.