Con "I’am Open to That" Samsung se propuso crear un tipo de mantra o afirmación de todo lo maravilloso que le puede esperar al ser humano cuando expande su mente y su corazón a todo lo que le rodea.

El psicodélico film se inicia como un joven despojándose de un traje de oso polar para llamar a sus madre antes de meterse a bailar alegremente con pingüinos, alienígenas, gatos y hasta zombis. El protagonista se convierte a continuación en una mujer, que es la que copa todos los focos en la segunda parte del spot, donde quienes por allí desfilan no paran de repetir el mantra "I’m Open to That".

Mark Bernath, director creativo ejecutivo de Wieden+Kennedy Ámsterdam, asegura que cuando la agencia ideó el spot quiso que su música y sus bailes fuera hasta cierto punto similares a los marchosos preludios de la ceremonia de los Oscar.