San Miguel tiene una historia que contar. Real y desconocida por todos, con muchos personajes, unos míticos y otros anónimos, que la han convertido en la icónica marca que es a día de hoy. Una historia que comienza en el Puerto de Manila en la última década del siglo XIX, como la aventura de unos emprendedores españoles que quisieron hacer realidad un sueño: crearla primera cerveza del sudeste asiático.Lo consiguieron,en los años 30 ya era la cerveza más vendida en Asia con presencia en las urbes más cosmopolitas del momento (Guam, Hong Kong, Shanghái,…). En 1952 decidieron regresar a casa, fue una larga y dura travesía pero logran traer consigo la codiciada levadura. Así es como empiezan de nuevo, siendo los primeros en España en usar cebada cerveceray creando así la primera cerveza de categoría “Especial”. Continuaron paso a paso llegando a cada rincón de la Península, cuando la cerveza era una bebida básicamente local, cada región tenía la suya. En los años 60siguieron explorando el mundo: Europa, África... En cada lugar conociendo a la gente más interesante, aprendiendo, echando raíces. No siempre fue fácil, pero nada les detuvo, nada quebró el espíritu inconformista/inquieto y las ganas de ir con su cerveza más allá.
Es una historia que no termina, dado que el spot trasmite la mirada al futuro de una historia inconclusa, que se escribe mientras el espectador la ve, y en la que “lo mejor está por llegar”.
Nadie mejor para darla a conocer que Juan Antonio Bayona, el director de películas tan premiadas como Lo Imposible, y que actualmente tiene en manos dos proyectos internacionales: Un monstruo viene a verme y la segunda parte de Guerra Mundial Z. Sus películas son habituales de la Black List, la lista de guiones que más gustan en Hollywood en busca de financiación.
“Todo el mundo conoce la cerveza San Miguel pero muy pocos son conscientes de su origen. Es toda una aventura protagonizada por unos españoles que cruzaron el mundo de una punta a la otra para llevar adelante una idea loca que acabó triunfando. Era muy atractivo poder contar esta historia escuchada de boca en boca por personas alrededor del planeta”, afirma Juan Antonio Bayona. De hecho esto fue lo que le hizo elegir el tipo de narración, en tercera persona, como esa buena historia que te cuenta un amigo mientras compartes con él una cerveza.
Y esa ha sido la gran apuesta de la marca: mostrar su historia, enseñarla al mundo con orgullo. Eso fue lo que sedujo al director cuando le ofrecieron el proyecto. “Me gustaba la idea de ver ese relato contado de un continente a otro, en situaciones tan diferentes pero todas muy evocadoras”, comenta.
El spot se ha rodado en dos países: España y Tailandia, entre los meses de abril y mayo de 2015. Para Bayona fue una oportunidad para volver a rodar con el equipo de producción tailandés de Lo imposible,“reencontrarnos después de estos años y poder comentar el éxito de la película con ellosme hizo muy feliz”.
La campaña, cuyo claim es “Y lo mejor está por llegar”, se estrenó en prime time el 22 de junio, en formato teaser, y se puede ver la versión completa desde el 25 de junio.Las escenas recorren localizaciones tan dispares como las abarrotadas calles de Bangkok, un puerto internacional, un avión militar, un mercado de fruta y verdura por el que cruza un destartalado tren, o una idílica playa. De todas las escenas, Bayona guarda un especial recuerdo de las rodadas en un jazz-bar de Barcelona. “A pesar de las horas de rodaje y del cansancio acumulado, la música comenzó a apoderarse del set de rodaje y finalmente se convirtió en una verdadera fiesta”, señala.
De todos los personajes que aparecen en la historia, él se identifica con un músico que se dirige al escenario para dar un concierto con su guitarra eléctrica en la mano, aunque reconoce que también se identifica con los protagonistas de la aventura real. “Como los emprendedores de San Miguel, soy una persona que no le gusta ponerse límites a sus objetivos y trabajo con total empeño hasta alcanzarlos o, por lo menos, a quedarme lo más cerca de la meta que me había planteado”, concluye.