Asoporcicultores representa a los productores de carne de cerdo en Colombia. En este país, la carne de cerdo tiene una altura simbólica que se interpone entre el consumo y la cotidianidad.

Con el objetivo de incrementar su ingesta entre los consumidores colombianos, TBWA Colombia busca atribuir al cerdo unos valores intangibles que generan beneficios emocionales en los consumidores, tales como “amiguismo”, “ternurismo” o “fanatismo”, entre otros, de tal forma que se convierta en la carne “de todos los días”.

El humor, seña de identidad de esta campaña, permitió crear unos comerciales diferentes en una categoría llena de convencionalismos. Los valores intangibles que se atribuyen a la carne de cerdo se han convertido en palabras inexistentes –“Ternurismo” y “Amiguismo”, títulos de los dos comerciales que abren la campaña-, creadas a partir de conceptos preestablecidos pero con un matiz humorístico.

Estas palabras detonan una situación de consumo que se dramatiza con un giro inesperado, el cual nos lleva a tomas de producto manejadas con una apetitosidad natural, orgánica, en el mismo entorno del comercial.