Topper pone todo en juego
(05/10/06). La marca de indumentaria deportiva inauguró un local emblemático en Avenida Santa Fe, en Buenos Aires. Un enorme corazón que palpita incesantemente y deja escuchar el sonido de sus latidos le confiere vida y movimiento a este nuevo y singular local.
Topper inauguró su local emblema en plena Avenida Santa Fe. Sus características espaciales y funcionales, su particular tipología arquitectónica e iconográfica sientan las bases para el diseño de futuros locales de la marca.
Tanto sus contenidos, como lo expresivo de su arquitectura y lo vanguardista de ciertas instalaciones artísticas desarrolladas en su interior sorprenden visualmente al público y le confieren al edificio originalidad y una gran diferenciación formal.
Para ello se han desarrollado recursos escénicos, lumínicos y audiovisuales que expresan de una manera explícita el concepto de que en Topper todo está en juego.
Por eso, a partir de ahora, los locales Topper están vivos, laten, palpitan, respiran, se estremecen, se emocionan.
Los locales Topper tienen corazón y nervios.
En la avenida Santa fe, detrás de la coraza tecnológica que envuelve al edificio, asoma un estilizado y artístico corazón que palpita a toda hora, estableciendo un expresivo contrapunto entre la solidez de la avanzada cubierta arquitectónica y sus formas orgánicas cinéticas.
Se trata de una escultura neumática en movimiento que se dilata y se contrae y emana una luz intermitente y sincrónica con los latidos, proyectada hacia el exterior a través del volumen del corazón.
Dichos latidos tienen su expresión sonora característica. Los ecos del pulso cardíaco, recreado artísticamente, son reproducidos en sincronismo con la luz y el movimiento.
Los locales son atravesados por un sistema de tubos y líneas luminosas qye recorren muros. Es el sistema nervioso que se pone iridiscente con el impulso y la energía del corazón de Topper reforzando la idea de la vitalidad del edificio.