La mayoría de los dos millones de autistas que hay en Brasil utilizan tarjetas de comunicación visual para ayudar a comunicar actividades básicas. Estas tarjetas se crearon hace casi 40 años, pero nunca se han actualizado.
En este contexto, la iniciativa propone que las tarjetas se actualicen utilizando inteligencia artificial, a través de una plataforma en línea. Los interesados pueden acceder a esta web para crear sus tarjetas, interactuando con una red neuronal que analiza miles de millones de datos online.
Según la marca, estudios científicos demuestran que interactuar con autistas a través de su hiperfocalización ayuda a mejorar la comunicación. Partiendo de esta base, el proyecto permite crear tarjetas inspiradas en los intereses y pasiones de cada autista.
De esta forma, si a una persona del espectro le gustan los dinosaurios, por ejemplo, podrá generar varias tarjetas con este tipo de dibujo, en situaciones básicas, para que se sienta más comprometida a interactuar con las tarjetas y más motivada a comunicarse.
La plataforma tuvo toda su arquitectura desarrollada para autistas, respetando colores y tipologías más amigables para ellos.
"Vivo continúa con su propósito de digitalizar para acercar a las personas y trae un proyecto que puede ayudar a familias y educadores a promover una experiencia diferente e inmersiva con las personas autistas", afirma Marina Daineze, directora de marca y comunicación de Vivo.
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