La idea de la campaña es mostrar, de una manera joven, informal y con buen humor, como el modelo compacto de Volkswagen es capaz de simplificar los hecho complejos del día a día en las ciudades y llevarlas a un mundo mejor. En las primera escena del comercial, que utiliza la animación, se ve un Fox estacionado en un lugar tranquilo. En off, el locutor habla sobre el amplio espacio interno del modelo y da inicio a una serie de imágenes continuas que, con la narración, explican la campaña: “Si usted compra un Fox y todo el mundo hace lo mismo, habrá más espacios en las calles. Sin las peleas por los lugares, las personas se gustarán más unas de otras. Con más amigos en el mundo, menos gente va a apoyar las guerras, los gobernantes acabarán con las armas, serán más admirados por el pueblo y pasarán a ser copiados por los próximos líderes. El planeta vivirá siempre en paz”. El locutor, en off, concluye: “Por un mundo mejor. Compre un Fox”. Las gráficas son dos “storyboards”. Insight Todas las campañas de Volkswagen tienen como base un profundo trabajo de planning, con investigaciones cuantitativas y cualitativas y el uso de técnicas y softwares que ofrecen el mejor camino para la solución creativa. Los estudios realizados por el Planning concluyeron que el Fox es un auto urbano, simple, moderno y que, por su espacio interno amplio, número de porta objetos y altura, es un modelo de “contenido”, versátil, inteligente, divertido y sorprendente, que torna la vida más fácil y práctica en una ciudad. Volkswagen y el medio ambiente El desarrollo de Volkswagen con la protección al medio ambiente va más allá de sus campañas publicitarias. Volkswagen también invierte en tecnologia para eso. Todos los recursos tecnológicos posibles son en favor de la defensa del medio ambiente. En virtud de esa preocupación ambiental, todas las fábricas brasileñas son certificadas por el ISO 14001 y siguen la política de gestión ambiental, que incluye mejor aprovechamiento de los residuos, además de adoptar prácticas como sistemas de recicle de agua industrial, utilización de óleo biodegradable (a base de vegetales) para la lubrificación del sistema de aire comprimido de las máquinas de producción y testeos de motor a frío, que no generan emisiones gaseosas ni ruido.