Niña lanza un nuevo comercial para Bodegas Callia, cuyo objetivo es trabajar sobre el momento de la vuelta a casa, dejar atrás todas las tensiones que acumulamos durante del día, para reconectar con uno mismo.
Llegar a casa y tomarse un momento antes de la comida, para abrir una botella de Callia, bajar el ritmo y resetearse. Cortar con todo, mientras se disfruta una copa de vino habilitando un momento para “volver a vos”.
Busca generar empatía con una audiencia sobre exigida por las tensiones cotidianas que se ven a lo largo del comercial. Que va en busca de una vida menos vertiginosa y frenética. Que tiene una actitud más relajada ante la vida.
Bodegas Callia apuesta a la simpleza en el rediseño de su logo proponiendo renovarse, y mantenido la suavidad como un intrínseco de producto. Una propuesta más descontracturada que busca suavizar las asperezas externas.